La economía se expandirá como máximo un 2,25 por ciento.
El escenario es "preocupante", admitió el presidente del instituto emisor, Rodrigo Vergara.
Vergara llamó a los actores políticos y económico a "redoblar los esfuerzos para devolver el dinamismo a la economía".
El presidente del Banco Central, Rodrigo Vergara, dio a conocer este miércoles ante el Senado el Informe de Política Monetaria (IPOM) correspondiente a septiembre, que recortó la proyección de crecimiento del PIB para este año a una cifra que fluctuará entre el 1,75 y 2,25 por ciento.
En el IPOM anterior, de junio, el crecimiento se proyectaba en un rango de entre 2,5 y 3,5 por ciento.
"En los últimos meses el panorama económico en Chile ha tenido cambios importantes y la desaceleración ha sido más marcada de lo previsto, e incluso más persistente", dijo Vergara ante los senadores.
"Hace un año proyectamos un crecimiento para 2014 entre 4 y 5 por ciento y ahora (...) se espera una expansión de entre 1,75 y 2,25 por ciento; mientras que para 2015 se espera una expansión entre 3 y 4 por ciento, por debajo del crecimiento esperado de mediano plazo", indicó el presidente del instituto emisor.
"La fuerte reducción del crecimiento es, sin duda, una noticia preocupante, que debe mover a todos los actores, políticos y económicos, a redoblar los esfuerzos para devolver el dinamismo a la economía chilena, especialmente considerando que –como es nuestro convencimiento- Chile tiene todas las herramientas para lograr un mayor crecimiento y mejorar así el bienestar de sus habitantes", advirtió.
Causas
Rodrigo Vergara explicó que la actividad y la demanda interna han mostrado una debilidad mayor y más persistente que lo previsto hace algunos meses, a lo que se sumó la mayor caída de la inversión y una desaceleración más marcada del consumo privado.
"La desaceleración de la economía era, en parte, un fenómeno esperado", dijo el ejecutivo, que apuntó también a "importantes factores idiosincráticos, como la maduración del ciclo de inversión minera y del impulso fiscal asociado a la reconstrucción del terremoto del 2010".
"El debilitamiento de la actividad y del gasto, tanto del consumo como de la inversión, ha ido más allá de lo que se preveía", lo que coinciden con un deterioro importante de las expectativas de consumidores y empresas durante el 2014.
El Central prevé también que la inflación siga sobre el 4 por ciento en 2014 y proyectó un aumento del desempleo, pues ya se observa un incremento en las solicitudes de seguro de cesantía.
DC: Ha habido ruido por temas mal planteados
Los senadores reaccionaron manifestando preocupación ante la exposición del presidente del Central.
Desde la DC el timonel Ignacio Walker comentó la necesidad de reconocer que en materia económica en el último tiempo "ha habido mucho ruido, ha habido -a lo mejor- temas mal planteados".
"Eso genera una cierta preocupación desde el punto de vista de dos elementos clave en la reactivación económica, como son la confianza y las expectativas. Todo lo que hagamos en invertir en confianza y expectativas de los agentes económicos es bienvenido", señaló.
El senador de Renovación Nacional José García Ruminot dijo en tanto, ante sus pares, que "esta desaceleración económica tiene rostro, no son sólo cifras".
"Tiene rostro en la gente que sale a buscar trabajo y que no lo encuentra, tiene rostro en los emprendedores que buscan sacar adelante sus emprendimientos y que se encuentran con la dificultad de que las condiciones de mercado no les permiten colocar sus productos, entonces, la combinación es mala y, socialmente, muy peligrosa: menor crecimiento económico, mayor inflación; es decir, la gente tiene que sacar más dinero para cubrir sus necesidades básicas", dijo García.
Gobierno: La desaceleración no es estructural
Los malos números del informe del instituto emisor fueron comentados en La Moneda por el ministro vocero, Álvaro Elizalde.
"Bueno, lo advertimos desde hace mucho tiempo: Chile inició un proceso de desaceleración desde fines del año 2012, y las cifras que ha dado a conocer el Banco Central hoy dan cuenta precisamente del diagnóstico que formulamos incluso antes de asumir el Gobierno", señaló Elizalde.
El secretario de Estado destacó, sin embargo, que "ésta no es una desaceleración de carácter estructural; es más bien de carácter cíclico y, lo más importante, la proyección de las cifras para el próximo año son positivas".
Sin perjuicio de ello, "el Gobierno está adoptando una serie de medidas que han sido anunciadas por la propia Presidenta de la República y el ministro de Hacienda para que tengan impacto inmediato y generen mayor dinamismo", señaló Elizalde.
