Esto debido a la reducción en la expansión de la economía chilena.
"A la caída de la inversión se ha sumado una desaceleración del consumo privado", señaló el instituto emisor.
La inflación interanual acumulada en el primer semestre llegó en junio al 4,3 por ciento.
El Banco Central decidió este martes reducir la tasa de interés de política monetaria en 25 puntos base, a 3,75 por ciento anual, la quinta desde enero de 2012, debido al frenazo en la expansión de la economía chilena.
"Los antecedentes de la economía local muestran que el ritmo de expansión de la actividad y la demanda ha seguido reduciéndose. A la caída de la inversión se ha sumado una desaceleración del consumo privado", señaló el instituto emisor en un informe difundido este martes.
La decisión del Banco Central no coincidió con las expectativas y recomendaciones de los analistas y expertos, que esperaban que la tasa se mantuviera en un 4 por ciento.
La tasa de interés de política monetaria, que determina el costo de los créditos, es uno de los instrumentos que utiliza el Banco Central para mantener la inflación controlada.
El Banco Central destacó que la tasa de desempleo se mantiene baja pese a que se observan señales de menor dinamismo del mercado laboral.
La inflación interanual acumulada en el primer semestre llegó en junio al 4,3 por ciento, por encima del rango meta de 2,0 a 4,0 por ciento, aunque según el emisor las expectativas de mediano plazo se mantienen en torno al 3 por ciento.
"El escenario más probable sigue considerando que la inflación se mantendrá por algunos meses por sobre el límite superior del rango de tolerancia para retornar luego a la meta", indicó el comunicado del Banco Central.
Ambito externo
En el ámbito externo, los últimos antecedentes confirman las perspectivas de recuperación de las economías desarrolladas, en especial Estados Unidos, y un deterioro en las proyecciones de crecimiento de los países emergentes.
También destaca el aumento del precio del cobre, el principal producto de exportación de Chile, y la caída de los precios de los productos agrícolas.
El Gobierno recortó este lunes su previsión de crecimiento económico de un 3,4 a un 3,2 por ciento y elevó su proyección de déficit debido a la mayor desaceleración de la actividad interior, los efectos del terremoto ocurrido en el norte en abril pasado y el incendio en la ciudad de Valparaíso, entre otros factores.
Así lo anunció el director de Presupuestos, Sergio Granados, ante una comisión del Parlamento, en la que indicó también que la cifra del déficit fiscal efectivo se ha elevado a un 2 por ciento, más de un punto por encima de la que manejaba hasta ahora el Gobierno.
