El ex ministro de Economía y de la Comisión Nacional de Energía (CNE) de Ricardo Lagos, José de Gregorio, se refirió este lunes a polémica generada luego de que el actual ministro de Hacienda denunciara la existencia de supuestos gastos comprometidos sin financiamiento por unos 5.500 millones de dólares, afirmando que "la discusión pasó de ser técnica a ser política".
Este lunes comenzó -en la sede del Congreso en Santiago- una sesión de la comisión especial mixta de Presupuesto que reunió al ministro de Hacienda, Felipe Larraín, con sus antecesores Nicolás Eyzaguirre y Rodrigo Valdés para explicar los gastos fiscales de los gobiernos anteriores.
En conversación con Lo Que Queda del Día, De Gregorio afirmó que "se generó una discusión al llamarle gastos comprometidos porque la sobre ejecución efectivamente puede ser muy difícil de revertir pero no es algo comprometido 100 por ciento. Lo que se generó fue una confusión basada en nuevas definiciones en las que las sobre ejecuciones son gastos comprometidos".
"En esa dimensión se produjo esta confusión de lenguaje cuando el tema de fondo es que existen presiones que ponen desafíos fiscales importantes a la autoridad pero no son gastos comprometidos (...), son presiones de gastos. Esto indujo a una discusión que no es saludable para dimensionar y resaltar los desafíos fiscales de la actual administración", añadió.
"Todos los ministros terminaron yendo al Congreso, lo cual transformó esto en una cosa política por algo que se pudo haber evitado (...) y haber tratado de resolver esta discusión independientemente a través de la opinión del Consejo Fiscal y seguir al discusión", agregó.
"La situación heredada es una situación fiscal compleja donde hubo mucha sobre ejecución, en particular en el sector salud, que pone dificultades y agrega estrecheces pero siempre se heredan estas situaciones. Uno de los desafíos que se tienen es partiendo de lo que se recibió y se recibió un déficit del 2,8 por ciento del PIB", concluyó De Gregorio.
Las promesas que complican al Gobierno
Además, el ex ministro de Lagos afirmó que las propuestas de crecimiento hechas en la campaña de Piñera deben dar paso a otra prioridad, que es volver a estabilizar la deuda pública.
"El ministro Larraín está reconociendo una situación complicada que efectivamente le limita su capacidad de maniobra en materia tributaria. De facto se esta reconociendo una situación más estrecha de los números con los cuales estaban trabajando", afirmó.
"Dentro de las propuestas estaba generar estimulo a la inversión. Desde mi punto de vista, el principal estimulo es tener un panorama relativamente claro de reformas y de que se va a hacer y tener claro adonde va a ir el tema fiscal", agregó.
"Me parece que es mucho mejor en este sentido ser realista. Sin duda que el tema prioritario es volver a una situación que nos permita estabilizar la deuda pública", dijo De Gregorio.
La complicada situación de Argentina
Por último, el economista se refirió a la complicada situación económica por la que atraviesa Argentina luego del aumento de la tasa de interés en un 40 por ciento y cómo afectará a Chile.
"Nos golpea en algo. Lo que pasa en Argentina es una agudización muy fuerte de lo que esta pasando en la mayoría de las economías emergentes. (La corrección del tipo de cambio) le pegó muy fuerte a una de las economías más vulnerables", explicó.
"El problema de Argentina es que le ha costado mucho controlar su tasa de inflación y a pesar los esfuerzos del Gobierno, todavía la parte fiscal depende mucho de la emisión monetaria, lo que genera una inflación importante que agudiza el problema", aseveró De Gregorio.
"Argentina vive una situación macroeconómica vulnerable. Con una economía como la de Argentina, con tasas muy altas y las expectativas bastante desancladas, las medidas que deben tomar son bastantes más severas", añadió.