El precio del dólar sigue intratable y no para de aumentar sus máximos históricos en nuestro país, y tras superar la barrera de los 950 pesos la última jornada, este miércoles tocó el piso de 1.000, fuera de todo precedente, aunque ya previsto por los expertos.
Luego de llegar ayer hasta 953,98 pesos y cerrar en 951, hoy la divisa estadounidense abrió la jornada en 959 pesos, a las 10:00 horas ya superaba los 960, a las 11:00 se cotizaba en 972 y media hora después, a las 11:37, se cotizó en 1.000, según reporta la Bolsa Electrónica de Chile.
Luego de ello cayó 22 pesos y luego subió otros pocos, para situarse en 984,5 al mediodía y en 965 cerca de las 14:00 horas, nivel en el que cerró la jornada.
"Sin lugar a duda es una reacción de los mercados a una posible recesión mundial, que viene acompañada con un menor precio del cobre y políticas de la Reserva Federal destinadas a controlar la inflación", analizó Arcadio Cerda, académico de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Talca.
"Además -continuó-, a nivel local podemos observar que existen otras incertidumbres respecto al futuro social y económico del país, relacionadas a la nueva reforma tributaria y a una nueva Constitución. Estos elementos, tanto internos como externos, han llevado a que los distintos agentes económicos tiendan a protegerse o a buscar mayor rentabilidad en el dólar, dadas las nuevas tasas de la Fed".
Caso contrario es el del cobre, que continúa su caída libre y completó otra jornada a la baja: esta jornada retrocedió en 3,61% para transarse en 3,41 dólares la libra en la Bolsa de Metales de Londres, su menor precio desde noviembre del 2020.
De esa forma, el metal rojo está cada día más lejos del piso de los 4 dólares, por sobre el cual se mantuvo entre agosto del 2021 y fines de junio del 2022.
Expertos esperan, en tanto, que el dólar siga superando sus propios récords.
"Encontrar un techo en el dólar en este momento es extremadamente complejo. En su momento se pensó que los 900 podían servir como un apoyo de corto plazo. Ahora los 1.000 pesos serían un nivel sicológico razonable para pensar que también podría tener alguna eventual caída, sobre todo en el muy corto plazo. Pero con los fundamentos tan alcistas que tenemos tanto a nivel externo como local, es bastante probable que se mantenga esta alza, independiente de alguna corrección de muy corto plazo, deberíamos mantener una tendencia alcista al menos en las próximas semanas", vaticinó Ricardo Bustamante, jefe de estudios trading de Capitaria.
A la vez, el experto planteó que una forma para ver alguna caída es que "venga una intervención fuerte: el problema es que, como aún falta para el plebiscito de salida y sigue la incertidumbre, y probablemente esta inestabilidad genere mayores alzas del dólar, es bastante probable que se estén guardando estas intervenciones pensando en un momento más cercano al plebiscito de salida".
"Pero con esta fuerte alza podría venir alguna medida extraordinaria que podría generar una caída del dólar contra el peso chileno, pero considerando que son efectos de más corto plazo si es que los fundamentos siguen siendo tan fuertemente alcistas", estimó.
Por su parte, Alejandro Weber, decano de la Facultad de Economía y Negocios de la U. San Sebastián, alertó que "esto es una mala noticia para las familias chilenas, para la clase media y para los sectores más vulnerables, porque el 30 por ciento de nuestro Producto Interno Bruto son importaciones, y nosotros no solamente importamos automóviles y electrónica".
"También -continuó el ex subsecretario- trigo, aceite vegetal (que ha subido un 67 por ciento en los últimos 12 meses), y esto significa que consumir alimentos en nuestro país seguirá siendo más caro y la inflación seguirá subiendo, afectando aún más el bolsillo de las familias chilenas".
A los análisis de expertos se sumó Ricardo Montero, decano de la Facultad de Administración y Negocios de la U. Autónoma, quien sostuvo que "para la economía nacional, al menos para el segundo semestre muchos están hablando de una recesión técnica, lo que hace que los capitales externos busquen refugio en otras zonas más desarrolladas".
"Con todo, este aumento en el valor del dólar puede significar un punto positivo para el sector exportador, en la medida que les permite ganar cierto grado de competitividad. De todas formas, esto que vemos en el mercado cambiario le va a generar nuevos dolores de cabeza al Banco Central en la medida que esta devaluación nominal va a traspasarse con alguna medida a la inflación local", expuso.
MARCEL PIDE TRANQUILIDAD Y PONE FOCO EN SECTORES VULNERABLES
En el Congreso, donde expone sobre la reforma tributaria, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, apuntó que "es importante recordar que la política cambiaria en Chile es responsabilidad del Banco Central. Por lo tanto, sería bueno y oportuno que el Banco Central pudiera compartir su propio diagnóstico sobre lo que está ocurriendo".
Por su parte, "al Gobierno le toca preocuparse de amortiguar o compensar los efectos que puede tener especialmente sobre los sectores de menores recursos. No es un impacto directo, porque afortunadamente Chile no es una economía dolarizada, pero sí ocurre de manera indirecta a través del impacto en algunos precios en particular y de la inflación más en general", complementó Marcel, anticipando que "la próxima semana, probablemente, vamos a tener algunas novedades" respecto a las esperadas ayudas sociales de temporada invernal.
"Hay que estar tranquilos en cuanto a que factores que en el pasado hicieron a Chile especialmente vulnerable frente al tipo de cambio, hoy no están: no tenemos descalces cambiarios en las empresas ni en el sistema financiero que pudieran generar un impacto", indicó.
Sin perjuicio de ello, "debemos tener claro qué problemas no existen o son limitados, y dónde están más concentrados para actuar en ese ámbito en particular", señaló el jefe de la billetera fiscal.
"Es tremendamente preocupante", manifestó más tarde el Presidente Gabriel Boric, coincidiendo con los expertos en que "hay diferentes causas; una de las principales es la baja del precio del cobre producto de dos factores externos: uno son las perspectivas de recesión en Europa y Estados Unidos, que recién se van a aclarar en las próximas reuniones de la Reserva Federal, que todavía tienen un tiempo, y además, el proceso que todavía sigue China con el cierre de ciudades, que ha bajado la demanda de cobre".
"Ahora, también hay factores internos, y en esto la incertidumbre sin lugar a dudas contribuye, y por eso es importante que los diferentes actores políticos demos señales de certidumbre", emplazó el Mandatario.