La aerolínea Gol, la mayor de Brasil por vuelos nacionales, anunció este jueves que se acogió voluntariamente al capítulo 11 de la ley de quiebras de Estados Unidos, una fórmula que permite a una empresa deudora reestructurarse, sin la presión de sus acreedores.
"La compañía utilizará el mecanismo de Estados Unidos para fortalecer su posición financiera", informó Gol en un comunicado enviado al mercado. Esto, luego que la empresa registrara una deuda que ascendió a 4.122 millones de dólares hasta septiembre del año pasado.
La empresa aclaró además que, mientras negocia una refinanciación para el monto, seguirá ofreciendo sus servicios de transporte aéreo de "forma segura, confiable y sin interrupciones" y que todas las operaciones continúan normalmente, así como la validez de sus boletos y reservas.
De este modo, Gol usa el mismo instrumento requerido en mayo de 2020 por la aerolínea Latam, la principal de Latinoamérica, para superar la grave crisis que sufrió como consecuencia de la pandemia de la COVID-19.
El mismo capítulo fue utilizado con éxito por otras aerolíneas internacionales golpeadas por la pandemia como United Airlines, Delta, Aeroméxico y Avianca Colombia.
YA CUENTAN CON FINANCIACIÓN DE 950 MILLONES DE DÓLARES
Para reestructurarse, la aerolínea dijo que ya cuenta con un compromiso de financiación por 950 millones de dólares ofrecido por miembros del Grupo Ad Hoc de los propietarios de títulos de Abra, el conglomerado que controla la aerolínea brasileña y la colombiana Avianca.
Como esta financiación depende de que la Justicia de Nueva York acepte su petición de acogerse a la ley de quiebras, Gol anunció que intentará la liberación de los recursos en la primera audiencia a la que acudirá ante los tribunales estadounidenses, prevista para los próximos días.
El consejero delegado de la aerolínea, Celso Ferrer, en declaraciones citadas en el comunicado, afirmó que la compañía ya logró mejorar sus ganancias y su posición financiera, por lo que el proceso de reestructuración le "permitirá enderezar definitivamente los desafíos generados por la pandemia".
Esto, ya que pese a los desafíos y a la menor disponibilidad de aeronaves, la empresa obtuvo en el tercer trimestre del año pasado uno de los mejores resultados operacionales para una aerolínea en América Latina, según el ejecutivo.
Fue el cuarto trimestre consecutivo en que la empresa obtuvo "márgenes operacionales altos y consistentes", así como ingresos brutos récords por 4.700 millones de reales, en un 16,4 % superiores a los del tercer trimestre de 2022.