Latinoamérica es la región que más ha alejado inversiones debido a la percepción de corrupción de los empresarios en el último año, según reveló el informe anual de fraude de Kroll.
El 72 por ciento de las compañías multinacionales encuestadas fueron disuadidas de operar en un país de la región debido a la percepción que éstas tienen de los niveles de fraude y corrupción en estos mercados, añade el estudio.
La directora de Desarrollo de Negocios de Kroll Argentina, Laura Matta, comentó que "definitivamente la globalización es un fenómeno que incentiva las inversiones a nivel internacional, sin embargo, tanto a nivel regional como a nivel local no hay una buena percepción de las empresas multinacionales y esto nos deja fuera en variadas oportunidades".
La mitad de los encuestados aseguran estar "altamente o moderadamente vulnerables" a este tipo de casos cuando deciden comenzar su expansión territorial.
"Hay una cantidad de inversionistas que son bastante cautelosos, que hacen estudios y evalúan los riesgos de cuál será el costo de mantener una estructura en el país considerando que deberá enfrentar temas como corrupción e inseguridad, pero no es suficiente, y es ahí donde América Latina queda fuera", argumentó Matta.
Para Kroll, la región ha realizado esfuerzos para endurecer sus controles, como es el caso de Brasil tras el escándalo de Petrobras que salpicó a la propia presidenta Dilma Rousseff.
Asimismo, la compañía comenta la situación de Argentina y su cambio político y económico con la llegada de Mauricio Macri el cual, a juicio de Kroll, "podría dar al país un nuevo rol a nivel latinoamericano y con ello nuevos desafíos".
Laura Matta comenta que "cuando surge cualquier sospecha de un acto de corrupción, es importante que el empresario local lo investigue a fondo y si resulta verdadero, sancionarlo conforme a las políticas de la empresa o recurrir a las autoridades legales si es necesario".
El informe anual detectó además que el 75 por ciento de las compañías a nivel mundial sufrieron un incidente de fraude en los últimos 12 meses, un aumento de 14 puntos porcentuales en solo tres años. "Es un problema serio que toca diferentes variables macroeconómicas, lo importante es no subestimarlo", concluye Matta.