El Ministerio de Hacienda expuso en la víspera a representantes de los partidos políticos la nueva reforma tributaria que ingresará en marzo al Congreso Nacional, la cual incrementará los impuestos a un mayor grupo de personas que en los términos propuestos en el proyecto original que fracasó el año pasado en la Cámara Baja.
Según El Mercurio, la única modificación que tendría este segundo proyecto es que el gravamen a las rentas personales aumentaría a partir del cuarto tramo de ingresos del Impuesto Global Complementario: es decir, entre las 50 y 70 Unidades Tributarias Anuales (UTA), equivalentes a ingresos entre 3,2 millones y casi 4,5 millones de pesos mensuales, quienes verían un aumento de la tasa marginal del 13,5% actual a un 16%.
La reforma original, rechazada el 8 de marzo del 2023 en su primer trámite constitucional, planteaba que el incremento de los tributos desde el quinto tramo de ingresos, donde se ubican los contribuyentes con rentas entre 4,5 millones y 5,8 millones de pesos mensuales (70-90 UTA).
De acuerdo con datos del Servicio de Impuestos Internos, recogidos en base a información comercial en 2022, la modificación del nuevo proyecto incorporaría a 196.165 personas al grupo de quienes verán alzas en sus gravámenes, cifra que representa al 1,7% del total de personas que pagan el Impuesto Global Complementario.
En los demás tramos, las subidas impositivas serán sucesivas en similar magnitud, con una tasa máxima marginal que pasará del 40% actual a un 43% para rentas sobre los 9 millones de pesos mensuales.
Así las cosas, con el nuevo esquema, 431.250 personas, el 3,8% de los contribuyentes de mayores ingresos, deberá pagar más impuestos.
En tanto, se mantendría sin cambios el tramo exento del impuesto, donde actualmente se ubican aquellos con rentas inferiores a 13,5 UTA, unos 868 mil pesos mensuales: equivalen el 74,3% del total de contribuyentes que declaran ingresos, unas 8,4 millones de personas.
En Chile Vamos insisten en que su línea roja es no permitir un aumento de impuestos, mientras que la Democracia Cristiana manifestó su preocupación por una eventual focalización que podría apuntar a los sectores de ingresos medios.
En el oficialismo, en tanto, igualmente hay voces que piden analizar "con mucha cautela", como el diputado Jaime Naranjo (PS), quien reprochó que "vamos a pasar del impuesto a los 'súper ricos' a terminar cargándole la mano a la clase media".
