El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, llamó a no "sobrereaccionar" por la baja en el precio del cobre y aseguró que el país está preparado para este tipo de situaciones.
Valdés comentó que "el mundo se ha puesto más complejo, pero quiero decir que Chile está bien preparado para estas circunstancias. El tipo de cambio se movió, el dólar ganó fuerza, estamos en 730 pesos, eso es un amortiguador que tenemos como país y por lo tanto la macroeconomía está funcionando bien, como un país sano".
"No hay que sobrereaccionar, son volatilidades pero sin duda muestran que las perspectivas para el precio del cobre para este año son peores que las que esperábamos y probablemente tengamos que ver maneras para adaptarnos mejor y priorizar aún más", añadió.
"La velocidad a la que vamos a avanzar en distintos proyectos va a depender de la realidad que enfrentemos", precisó el titular de Hacienda.
Mientras la titular de Minería Aurora Williams sostuvo que "hoy creo que la situación del mercado es expectante. Esperamos que el precio rebote, pero es una situación incierta debido a que las variables que definen el precio están dadas fundamentalmente fuera de Chile".
Por su parte, el diputado por la Región de Atacama Lautaro Carmona (PC), se mostró preocupado por las consecuencias que esta baja pueda traer a la pequeña minería, adelantando que "tengo una próxima reunión sobre todo con los sindicatos de pirquineros y de pequeños mineros porque la banda de sustentabilidad al precio quedó en 40 centavos, a un precio bajo los dos dólares con suerte va a tener un ingreso de 240".
Todo esto cuando la Sociedad Nacional de Minería (Sonami) señaló que esto afecta a los ingresos fiscales, indicando que el fisco recauda 60 millones de dólares menos por cada centavo de dólar en que retrocede el valor del cobre. Eso sí, añadieron que será poco probable que el metal rojo promedie un precio inferior a 2 dólares la libra este año.
El cobre llegó a su precio más bajo desde 2009 este lunes, cotizándose a 1,97 dólares en la Bolsa de Metales de Londres.
Lo bueno y lo malo
Respecto a cómo se vislumbra el panorama, el economista Alejandro Alarcón manifestó que "lo bueno, claramente, es que el país se torna más competitivo en sus ventas al exterior. Para poder exportar, tú necesitas invertir".
"Y es malo para la gente que compra productos importados, porque más de la mitad de los bienes en la economía son transables. Entonces, claramente eso afecta a la inflación. También es más malo para aquellos que les gusta ir de vacaciones fuera del país, porque es más caro ahora con un tipo de cambio más alto", añadió.