La cesta de 11 tipos de petróleo del cartel se vendió en la víspera a 65,02 dólares, 1,2 dólares más que el valor de cierre de la semana pasada.
El precio del barril de crudo de la OPEP registró su cuarto máximo histórico nominal en la última semana, al venderse el pasado lunes a 65,02 dólares, 1,20 dólares más que la última jornada, informó en Viena el secretariado de la organización.
Esta es la primera ocasión desde la introducción de la denominada "cesta OPEP" que el barril de referencia de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) se cotiza por encima de la barrera de los 65 dólares.
El valor del crudo sigue marcado por la incertidumbre que genera en los mercados el conflicto entre Irán, cuarto productor mundial de petróleo, y la comunidad internacional, que fustiga su programa nuclear.
El crudo Brent, de referencia en Europa, también está experimentando una carrera alcista, y después de marcar el pasado lunes su quinto récord consecutivo al tocar 71,62 dólares, en la sesión de este martes volvió a batir esa marca, cotizándose en 71,93 dólares.
En tanto, el Petróleo Intermedio de Texas (WTI) se ha cotizado por encima de los 70 dólares, pero aún por debajo de su máximo de 70,85 dólares, que alcanzó el 30 de agosto pasado por la destrucción del huracán "Katrina" en las infraestructuras petroleras del Golfo de México.
A la inquietud que produce el litigio nuclear con Irán se agregan otros factores de inestabilidad, como la violencia separatista en Nigeria, que ha supuesto la perdida de medio millón de barriles de petróleo en el bombeo del país.
De hecho, la situación "puede incluso empeorar" debido a la amenaza de huelga del sindicato que agrupa a los trabajadores de las petroleras en Nigeria, señalan los expertos de la consultora PVM en su boletín diario.
A ello se suma la amenaza de Chad de interrumpir el suministro de los 160.000 barriles de petróleo diario que produce si no se da vía libre a los fondos que le otorgó el Banco Mundial para la construcción de un oleoducto.
Por otro lado, existen problemas de refinación en EE.UU., el mayor consumidor de energía del planeta, donde los cuellos de botella para procesar el crudo están generando la caída de los inventarios de gasolina cuando se acerca una temporada de gran consumo debido a los desplazamientos por carretera en las vacaciones veraniegas. (EFE)
