Las grandes compañías aumentaron nuevamente el plazo promedio con que pagan sus facturas a las pequeñas y medianas empresas (pymes), según el último reporte trimestral de la Bolsa de Productos de Chile (BPC) y la Asociación de Emprendedores de Chile (Asech).
El reporte, que publica este lunes El Mercurio, revela que el desembolso promedio para las pymes en el segundo trimestre de 2019 tardó 60 días, once más que en el mismo periodo del año pasado.
Se trata del cuarto trimestre consecutivo de alza, en un período caracterizado por la entrada en vigencia, el 16 de mayo pasado, de la Ley de Pago a 30 días, que justamente busca reducir este tiempo con que las pequeñas firmas pueden cobrar a las grandes.
La ley busca que a partir de 2021 las empresas paguen en un máximo de 30 días sus facturas, aunque desde mayo aplica un período de transición con un plazo máximo de pago de 60 días.
Paradójicamente, la entrada en vigencia de la ley podría ser uno de los motivos que explican el alza del pago promedio, según los autores del estudio.
"Con los datos del segundo trimestre se confirmaría la tesis de que las empresas pagadoras se han 'anclado' en el nuevo plazo de 60 días establecido por ley", indicó Christopher Bosler, gerente general de la Bolsa de Productos, a El Mercurio.
Lo anterior ha afectado, agrega Bosler, a los proveedores en general, dado que desde que se comenzó a hacer esta medición, nunca habían alcanzado un plazo de pago promedio de 60 días. Sin embargo, anticipa que "debiéramos ver antes de dos años una tendencia contraria en los plazos de pago, bajando el promedio al guarismo de los 30 días que exige la ley para mediados de 2021".