La Justicia atribuyó responsabilidad la constructora por el mal diseño del inmueble.
Una familia corrió peligro de muerte a consecuencia de esta negligencia.
La magistrada del 20° Juzgado Civil de Santiago Gabriel Silva impuso una condena con indemnizaciones por 100 millones de pesos a la constructora Paz Froimovich por el mal diseño de los extractores de gas en uno de sus edificios, lo que provocó una grave intoxicación con monóxido de carbono a una familia.
Los hechos se remiten al mes de junio de 2006, cuando, tras salir de una ducha, el ingeniero Mauricio Gallardo Muñoz notó que sus hijas -Bárbara, de dos años, y Sofía, de cuatro años y siete meses- circulaban por el departamento "con movimientos descoordinados y erráticos".
El hombre las trasladó de urgencia al hospital, luego de lo cual toda la familia se sometió a exámenes que arrojaron altos niveles de monóxido de carbono en su sangre, que podrían haber causado graves daños neurológicos e incluso la muerte.
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| La sentencia consideró un informe de la SEC que acreditó los problemas de diseño por parte de la empresa. |
El fallo contempla una indemnización de 20 millones de pesos a Gallardo, otros 20 para su esposa, Alejandra Rivera, y 30 millones para cada una de sus hijas.
La sentencia -que consideró un informe de la Superintendencia de Electricidad y Combustibles, que comprobó los problemas- imputa responsabilidad tanto a la constructora como a uno de sus arquitectos, Eduardo Froimovich Libedinsky, responsable del diseño del edificio, ubicado en calle Tarapacá 752, en el centro de Santiago.
La indemnización por perjuicios valora que "que la firma no observó los preceptos normativos y técnicos que resguardan la vida y la propiedad de estas personas, lo que provocó que los conductos colectivos de evacuación de gases no funcionaran de manera adecuada".
