Un jubilado puntarenense de 70 años llamado Hugo Soto Alvarado denuncia estar recibiendo apenas 200 pesos mensuales de pensión.
Soto trabajaba como gásfiter y a los 52 años realizó los trámites para lograr una jubilación anticipada, recibiendo desde ese entonces unos 40 mil pesos mensuales.
Sin embargo, hacia finales del año pasado, sin previo aviso y sin mayor explicación, esta cifra se redujo drásticamente: "En septiembre del año pasado fui a cobrar mi jubilación de 43 mil pesos y ningún problema, hasta octubre que llegué a la caja y me pegaron 200 pesos", contó el hombre al diario El Pingüino.
El anciano quedó sorprendido y no podía entender qué había sucedido: "La niña que me atendió me dijo que no era su culpa y que sólo debía cancelar lo que estaba en la orden de pago", relata.
"Ahí me dijeron que debía ir a la AFP, donde me explicaron de una ley, la que nunca he visto y me confundieron completamente, no entregándome ninguna solución. Luego me enviaron a la Superintendencia, que son los que los controlan a ellos; ésa fue su respuesta. A final de cuentas, me andaban trayendo de acá para acá, les dije que estaban jugando pin pon conmigo, así que me aconsejaron hacer una denuncia a la Superintendencia o comunicarme a través de internet, a lo que le pedí ayuda a mi hijo. Me respondieron que tampoco tenían nada que ver con eso", lamenta.
Hugo Soto trabaja actualmente para una empresa prestando servicios de gasfitería y dice que no ha ido a cobrar sus 200 pesos mensuales, porque el viaje es más caro que su pensión.
"Se ríen de la tercera edad"
El abogado Juan José Arcos, que representa el anciano, dijo a El Pingüino que ésta es una situación inédita, y espera "hacer gestiones para que los parlamentarios de la zona puedan adoptar algún tipo de medida".
"La ley que regula el sistema de AFP, el decreto ley, se puede modificar, no requiere un mayor trámite para que haya un cambio en la normativa, sino derechamente la voluntad de poder materializarlo, y si se van a estar riendo de la gente de la tercera edad, es mejor que se pueda cambiar la ley", advierte.
"Acá el Estado no se ha hecho cargo y si tuviéramos un sistema judicial civil que fuera efectivo, y no como lo que tenemos hoy, él podría incluso demandar al Estado por la negligencia y desidia por no dar una solución a este tipo de problemáticas. Acá no pueden existir jubilaciones que se burlen de las personas. El afectado claramente puede ejercer una acción por la responsabilidad en contra del Estado y no haber existido una preocupación en regular estas materias, entre eso colocar un recurso de protección en contra de la AFP", planteó el jurista.