Para Hernán Larraín todas las reformas "han sido un desastre".
Desde Amplitud afirman que no están convencidos de apoyar el proyecto que impulsará el Ejecutivo.
La Mandataria se reunió con los líderes de bancada de ambas cámaras este viernes.
Con la advertencia de la UDI de que es la "última oportunidad" del Gobierno y las dudas de Amplitud de participar en un pacto transversal, este viernes la Presidenta Michelle Bachelet se reunió con los jefes de todas las bancadas para iniciar el camino hacia un acuerdo nacional en pos de reformar el sistema previsional.
Tras la cita, que se extendiór cerca de dos horas en La Moneda, la senadora y timonel de Amplitud, Lily Pérez, manifestó que "no estamos convencidos de ir a un acuerdo nacional en este tema. Primero, porque hay sectores que no quieren mover ni un ápice de lo que existe hoy día y hay otros que creen que hay que destruirlo todo".
Por su parte, el timonel UDI, Hernán Larraín, expresó que "este acuerdo es la última oportunidad que tiene el Gobierno. Todas sus reformas han sido un desastre porque han sido ideológicas e impuestas con el espíritu de la retroexcavadora".
"Ahora la Presidenta ha dado señales de cambio y vamos a probar el movimiento andando", recalcó.
Valdés llamó a acuerdo
El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, explicó que cree "que esta es una gran oportunidad para todos, es una oportunidad para el mundo político, para demostrarle a la ciudadanía que podemos trabajar juntos cuando hay un objetivo tan importante como son las pensiones".
"Yo no puedo ser comentarista de gente que opina, yo creo que es una gran oportunidad y que tenemos que hacer todos un esfuerzo para que sea el pacto más amplio posible", precisó en relación a las críticas.
El senador Andrés Zaldívar (DC) planteó que este cambio "hay que hacerlo en forma muy responsable, en estos momentos hay mucha creatividad, hay gente que inventa muchas fórmulas".
"Aquí tenemos que tener mucha responsabilidad porque están los tiempos muy difíciles", continuó.
Juan Luis Castro (PS) sentenció que "los socialistas no estamos con un sistema de reparto y también le hemos dicho a la Presidenta que no quisiéramos 10 años para aumentar cinco puntos del aporte al empleador, quisiéramos un punto por año".
Mientras tanto, un nuevo actor del gremio empresarial manifestó su apoyo a la postura del Ejecutivo. Nicolás Ibáñez, ex controlador de Líder, valoró la propuesta, pero aseguró que el aumento del 5 por ciento sí se trata de un "impuesto al trabajo".
"Aquí no hay que ilusionarse, si el costo de emplear a una persona aumenta en un 5 por ciento es sin duda equivalente a un impuesto, pero es una realidad", aseveró.
