El proyecto que reajusta el salario mínimo inició este martes su tramitación en el Senado en una comisión fusionada de Trabajo y y de Hacienda, donde expusieron los ministros de dichas carteras, Jeannette Jara y Mario Marcel, junto al de Economía, Nicolás Grau.
Desde el Gobierno han expresado que esperan que el proyecto sea despachado tal como salió de la Cámara de Diputados, para evitar un tercer trámite legislativo.
"Queremos tener una tramitación expedita. Se ha dado el debate y creemos que es hora de que esto pueda materializarse como ley. Estamos con discusión inmediata, de tal manera de que ojalá podamos darle esta semana una buena noticia a los trabajadores, que tanto necesitan hoy día no sólo este reajuste, sino que la compensación que se da a los ingresos como complemento con esta alza también histórica en materia de asignación familiar", expresó el ministro de la Segpres, Giorgio Jackson.
A su vez, el ministro Marcel indicó que "nos sujetamos siempre a lo que vaya surgiendo en el proceso legislativo. Sabemos que en el caso del ingreso mínimo hay limitaciones de tiempo, por el hecho de que estamos discutiendo algo que tiene que pagarse en el mes de mayo".
"Se acordó continuar mañana y el jueves de ser necesario; si fuera así, la Sala votaría a comienzos de la próxima semana, lo cual todavía está dentro de los plazos posibles para nuevamente lograr que estos beneficios se paguen en el mes de mayo".
La idea del Gobierno es evitar que se produzca un tercer trámite legislativo, pues cualquier modificación al texto emanado de la Cámara Baja implica que sea votado nuevamente por esa corporación, por lo mismo no se insistió con un artículo ya rechazado, que definía que las pymes postulantes debían tener al menos el 15 por ciento de su planilla de trabajadores recibiendo el sueldo mínimo.
"Eso ya está incorporado en el nuevo informe financiero y no lo vamos a reponer", aclaró el ministro de Economía, Nicolás Grau, sosteniendo que aquel aspecto implica "en torno a 3 mil millones de pesos más, (pues) al eliminarse un requisito, son más empresas las que pueden postular".
Grau precisó que este aspecto "limitaba el acceso a este subsidio cuando la empresa fuera de un tamaño mediano y tuviera muy pocos trabajadores a los que estaba pagando el mínimo".
OPOSICIÓN INSISTE CON MANTENER INGRESO MÍNIMO GARANTIZADO
Sin embargo, desde la oposición han manifestado varias dudas, especialmente en lo referido a las pymes, con enfasis en el subsidio de apoyo a la pequeña empresa.
"Es importante que el Gobierno ha tomado la decisión de avanzar desde los 350.000 a los 400.000 pesos, eso sabemos principalmente que no lo paga la gran empresa, sino que la pyme, por ende, ¿cómo hacemos para que el Gobierno subsidie buena parte de ese aumento y no lo subsidie finalmente la pequeña empresa? Lo paga el subsidio del Gobierno, como, por ejemplo, lo hizo el Ingreso Mínimo Garantizado, que es un instrumento que entra en desuso, y la idea es proteger precisamente que las pymes no se vean afectadas", planteó el senador Luciano Cruz-Coke (Evópoli).
Su par de la UDI Juan Antonio Coloma complementó que "la mejor política pública sería mantener" el Ingreso Mínimo Garantizado, puesto que "es más sano garantizarle a todos los trabajadores" esa medida, "independiente de este otro esquema que se ha preferido, que es alzar un salario mínimo o una ayuda a las empresas".
"El sistema era distinto: la ayuda anteriormente iba directo a los trabajadores, ahora se hace a través de la empresa. Es una discusión que tenemos pendiente y esperamos resolver", agregó.
El senador Daniel Núñez (PC) comentó que "los trabajadores más precarizados, los más vulnerables, no están recibiendo el Ingreso Mínimo Garantizado que hizo Piñera, a diferencia del salario mínimo, que, si una empresa no lo paga, es multada, porque es una obligación legal. Entonces, francamente acá el único mecanismo que garantiza cobertura universal es el aumento del salario mínimo, no este famoso Ingreso Mínimo Garantizado".
"Acá hay un hecho brutal: con el Ingreso Mínimo Garantizado, el Estado está subsidiando a grandes empresas", fustigó el legislador.
La sesión, que comenzó cerca de las 10:30 horas, se prolongó por más de tres horas y la iniciativa será votada mañana en la comisión.
Senadores de oposición han planteado la idea de que se dilate hasta la próxima semana la discusión en la Sala y para eso el Gobierno debería renovar la urgencia.