El acto dialogó sobre la cinta "Dios me libre".
En Cooperativa en Vivo recalcó que no apunta a ninguna iglesia en particular.
El actor Iñigo Urrutia señaló que la cinta "Dios me libre" busca ser una creativa y satírica reflexión sobre el mundo de los telepredicadores, pero que no tiene afán de ofensa.
"Es una sátira de humor negro, que tomamos un tema que en Chile es como delicado el tema de la religión pero también (lo abordamos) con respeto y sin denunciar a ninguna iglesia en particular ni religión", indicó a Cooperativa en Vivo.
El filme muestra a dos primos que se unen para formar una secta religiosa y aprovecharse de incautos. Uno es productor audiovisual y narcotraficante, y aporta su fortuna mal habida para blanquearla financiando un programa de TV. Mientras que "Jonás", aspirante a pastor, será el rostro del programa y líder de la secta marcada por el éxito, el dinero y excesos.
