Constanza Arena habló en la víspera de los Premios Platino, que se fallarán el próximo sábado y para los cuales Chile cuenta con nueve nominaciones.
"Neruda" es una de las cintas chilenas que tiene nominaciones a los Platino.
El hecho de que el cine iberoamericano se esté situando en primera línea de la industria a nivel global es un fenómeno que beneficia a todos los países de esta comunidad cultural, asegura la directora de CinemaChile, Constanza Arena.
"Al posicionarse el cine iberoamericano a nivel global, ganamos todos", explica Arena durante una entrevista con Efe en vísperas de los Premios Platino, que se fallarán el próximo sábado y para los cuales el país austral cuenta con nueve nominaciones en esta edición.
"Cada vez hay más colaboración e intercambio entre las cinematografías de los países iberoamericanos", subraya la directora del organismo encargado de la promoción internacional de la industria chilena del séptimo arte.
"Con esto, Chile gana, porque tiene un talento exportable muy amplio. Pero además, al posicionarse el cine iberoamericano a nivel global, ganamos todos", subraya.
La existencia del programa Ibermedia, que estimula la coproducción de películas de ficción y documentales de los países iberoamericanos, y del Acuerdo Latinoamericano de Coproducción Cinematográfica "hace que el cine se vuelva más fuerte y competitivo" para acceder a los circuitos de arte y ensayo de otros países.
"El mercado de la industria chilena por excelencia es Europa, donde existe un elevado consumo de cine 'art house' y un gran interés por las cinematografías del mundo. A nivel comercial, Iberoamérica todavía no es fuerte", explica la directora de CinemaChile.
Y es por eso que la presencia en certámenes internacionales de prestigio resulta decisiva, como sucedió en la última edición del Festival de Cannes, que sirvió de trampolín a la cinematografía chilena para saltar a nuevos mercados y afianzarse en el europeo.
"En Cannes nos fue bien, porque tuvimos una presencia muy grande, aunque en esta ocasión no obtuviéramos ningún premio", señala Arena.
Sin embargo en los Premios Platino del Cine Iberoamericano, los pronósticos son más optimistas.
"Desde su creación, en 2014, a Chile siempre le ha ido bien en estos premios", subraya Arena al recordar que en esta edición hay nueve nominaciones para el cine chileno, entre ellas dos a la Mejor Interpretación Masculina (Alfredo Castro y Luis Gnecco), a la Mejor Dirección (Pablo Larraín), a la Mejor Película ("Neruda") y la Mejor Opera Prima ("Rara").
Además, este año por primera vez hay una serie nominada, "Bala Loca", una noticia que se conoció justo en el momento en que CinemaChile se preparaba en Cannes para participar en el MIPCOM, el mercado internacional de la televisión más importante del mundo.
"Hace tiempo que en Chile se producen series de televisión muy potentes. Partimos con "Prófugos", de Pablo Larraín, para HBO Latinoamérica, y después siguió "Los archivos del cardenal", de Andrés Wood, un cineasta chileno que ha hecho grandes series con un toque de revisión histórica", explica Arena.
La directora de CinemaChile no cree que haya una fórmula específica que explique el éxito del cine chileno en este momento, porque la producción es muy ecléctica.
"Cada director tiene un estilo muy marcado", dice. Pero si hay algo en lo que coinciden los críticos de cine internacionales es en que las películas "tienen un notorio vínculo con el presente que conecta con una realidad más global".
Arena sostiene que los jóvenes directores chilenos hacen su trabajo pensando en los festivales, no en las salas de exhibición de Chile, porque ahí "la puerta la tienen cerrada".
"Esto podría cambiar si hubiera una política de Estado, pero no es el caso. Los exhibidores son grandes corporaciones y Chile es un país en el que se protege mucho a la empresa privada", concluye la directora de CinemaChile.
