El ex baterista de Los Prisioneros conversó con Cooperativa sobre su participación en el homenaje al artista.
"Tiene unas ganas y una energía tremenda", dijo sobre su ex compañero de banda.
Tapia no quiso revelar detalles de su participación en "Nada es para siempre"
Todo nació desde el reencuentro de dos amigos que no se habían visto por una década, a pesar de haber compartido en una de las bandas más influyentes y populares de la historia de la música chilena.
Así describe el ex baterista de Los Prisioneros Miguel Tapia la iniciativa que lo tendrá compartiendo escenario con Jorge González en el concierto homenaje que recibirá este último el viernes 27 de noviembre en el Movistar Arena.
"Producto de su estado de salud me acerqué a él y me preguntó si quería ser parte de este evento. Todo se dio de una forma muy natural", relata a Cooperativa el percusionista.
La visita de Tapia a González se produjo hace algunas semanas, mientras el autor de "Fe" ensayaba junto a su banda de apoyo (Gonzalo Yáñez, Jorge de la Selva y Pedro Piedra) para preparar este show.
"Nosotros con Jorge hemos sido los que más tiempo hemos pasado en la banda. En los 90' siempre mantuvimos una conexión y una amistad. Visitar a Jorge González es visitar a un amigo", detalla Tapia.
En relación al estado de salud del ex vocalista de Los Prisioneros, el autor de "¿Quién mató a Marilyn?" asegura que "él está delicado. Hay que cuidarlo mucho y estar preocupado de su recuperación", aunque agrega que "la verdad es que lo veo mucho mejor de lo que me imaginé y de lo que me comentaron en algún momento. Jorge tiene una energía tremenda y se nota al verlo en esta situación que está cargando".
Respecto de su participación en el concierto "Nada es para siempre", Tapia prefiere no adelantar detalles y solo se remite a decir que "estas son canciones están incorporadas en el adn de Jorge, mío e incluso de muchos músicos".
"La música de hoy es mejor que la de los 80's"
Actualmente, Miguel Tapia se encuentra trabajando en otros proyectos musicales personales. Es su banda Travesía, conformada por amigos de su residencia en Pirque, lo que más le ocupa tiempo: "Es un proyecto hecho con mucho cariño y siempre con las ganas de estar ahí en la música".
Esta especie de reinicio en su carrera artística es algo que tiene muy contento al músico, debido a la baja exposición mediática que le produce: "Es una posición que siempre me gustó. Dentro de un país tan pequeño como el nuestro, me acomoda mucho ser una persona que pase bien inadvertida. Me permite una libertad que valoro infinitamente", indica.
Otro aspecto que lo tiene entusiasmado es la actual industria musical en Chile, ya que asegura que "la música de hoy es mejor que la de los 80's, porque hay más variedad".
