El vocalista de Queen y el actor Kenny Everett llevaron a la princesa al local.
Le pusieron una chaqueta militar, un gorro y unos lentes de sol.
Esta situación ocurrió en los 80.
Siempre acosada por la prensa, la princesa Diana de Gales vistió de hombre, idea del músico Freddie Mercury y el actor Kenny Everett, para ir hasta un bar gay a principios de los 80.
La princesa se disfrazó con una chaqueta militar, un gorro y unos lentes de sol, según detalla la actriz Cleo Rocos en un episodio de sus memorias que publica Sunday Times.
Fue tal el revuelo que causaron la llegada de Mercury y Everett que la presencia del "jovencito" pasó absolutamente desapercibida.
Rocos no detalla en sus memorias si Diana de Gales, vestida de hombre, tuvo alguna proposición aquella noche, pero sus protagonistas si le contaron que el aspecto de la princesa de hombre también era envidiable.
