En 2006 corrían los rumores de la reformación de una banda icónica del rock de los 90, a pesar de que su vocalista Layne Staley había dejado de existir a consecuencia de una sobredosis en 2002.
Más allá de los comentarios, positivos y negativos que pudo generar la noticia, la reunión se hizo efectiva y tras unos años de presentaciones, el fiato de la nueva formación dio a luz a un trabajo discográfico en 2009, "Black gives way to blue".
Con ese álbum y a pesar de su nerviosismo, por la responsabilidad que significaba formar parte de la resurrección de Alice in Chains, William Duvall reafirmó su presencia como voz y guitarrista del grupo, el cual ahora llegará a Chile por segunda vez en esta etapa de su trayectoria, el próximo 30 de septiembre, para presentar la placa "The devil put dinosaurs here".
En conversación con Cooperativa, desde Nampa, Idaho, EE.UU., Duvall explicó que esta nueva incursión en el estudio, "en términos de los sentimientos que la atraviesan, tiene un gran variedad de música en ella. Como la mayoría de los álbumes de Alice in Chains, comprende desde las canciones más pesadas, como 'Phantom limb'; del tipo baladas, como 'Choke'; hasta algo con sonidos más country, en la línea de 'Scalpel'. Además de otras raras y retorcidas como 'Lab monkey' y los sencillos 'Hollow' o 'Stone'".
Para Duvall, lo importante es que "todas estas canciones suenan diferente y representan la variedad que siempre ha alcanzado esta banda. El disco tiene su dinámica y tiene un gran rango de música, además de tópicos incluidos, como por ejemplo, en la canción que le da su nombre, 'The devil put dinosaurs here' habla de un cierto grado de estrechez mental que está intentando apoderarse del país de muchas maneras que resultan inquietantes".
"¿Es esto lo que queremos?"
Las temáticas de inspiración para "The devil put dinosaurs here" emanaron desde la coyuntura estadounidense en el periodo posterior a la publicación de "Black gives way to blue", cuando según Duvall la "gente que estaba siendo elegida para ejercer cargos públicos comenzó a decir las cosas más indignantes que podríamos llegar imaginar en la televisión abierta".
"Cuestionaban cosas como los derechos reproductivos de las mujeres, si los homosexuales deberían tener una protección igualitaria de la ley o que se pudieran casar, si deberíamos enseñar ciencia en los colegios o sólo creacionismo. Todos estos temas estaban siendo atacados en un diálogo que tuvo lugar entre las autoridades electas y la gente, la sociedad", indicó.
El nombre "The devil put dinosaurs here" viene justamente del hecho de que existen ciertas personalidades religiosas que aseguran que fue Diablo quien puso los huesos de los dinosaurios en la Tierra, para disuadir a los feligreses de los orígenes espirituales del mundo.
Así, "titular de esa forma el disco, es sólo nuestra forma de reírnos de la seriedad con que se sostienen ese tipo de pensamientos. Y, de cierta manera, poner un espejo frente a la sociedad, diciendo: '¿es realmente esto lo que queremos? ¿Es esta la visión que queremos apoyar? ¿Es esto a lo que aspiramos como pueblo?".
Sobre el grunge
Consultado por la especie de revival que ha tenido el estilo grunge en el último tiempo, la actual voz de Alice in Chains señaló que "no pensamos en términos de la música grunge, tampoco en movimientos o tendencias. La palabra grunge es un término del marketing aplicado a melodías interpretadas por una variedad de bandas de Seattle, incluso si no suenan similares unas con otras".
"Ahora, comprendemos el hecho de que surjan términos o frases con las que se identifique algo para hablar de ello más fácilmente, pero nosotros pensamos que Soundgarden es Soundgarden, Pearl Jam es Pearl Jam y nosotros somos Alice in Chains. Ninguno hace necesariamente algo que el otro ya esté haciendo, cada uno crea sus propias cosas".
"Obviamente estoy feliz de ver que Soundgarden se reuna, porque siempre ha sido mi banda favorita, desde que comenzaron a lanzar sencillos en 1987. Siempre nos han gustado, mantenemos una relación amistosa con ellos y los admiramos. Pero no pensamos en el grunge, resurgencias o patrones. Estamos contentos con hacer música, y también porque hay otras bandas que también la hacen", sostuvo Duvall.
El aterrizaje más increíble
Alice in Chains anteriormente estuvo en Chile durante la segunda edición del festival Maquinaria realizada el 2011, en el Club Hípico. Una visita que para Duvall se alza como "uno de los aterrizajes más increíbles que he tenido a modo de experiencia personal".
"Literalmente, desde que el avión llegó, nos abrieron las puertas a las seis de la mañana y la gente encargada de los servicios eran fanáticos. Llegamos al lobby del aeropuerto con personas persiguiéndonos con cámaras, tratando de entrevistarnos", contó.
"Luego subimos a los autos, llegamos al hotel. Hubo gente haciendo vigilia afuera todos los días y noches que estuvimos ahí. A todos los lados a los que íbamos, había gente que no podía creer que estuvieramos ahí. Los fanáticos allá son impresionantes. Dijimos que volveríamos y aquí estamos felices de hacerlo".
Proyectando lo que será el nuevo concierto de Alice in Chains en el país, para el que ya se han vendido más de 8 mil tickets y que tendrá lugar en el Movistar Arena, el próximo lunes a las 21:00 horas, William Duvall aseguró que "haremos cosas que usualmente no tenemos oportunidad de hacer cuando nos presentamos en festivales. Podría ser la oportunidad de explorar más profundamente el nuevo álbum y tocar canciones antiguas que no siempre interpretamos. Será una mezcla entre lo antiguo y lo nuevo, eso es seguro".