Corría 1987 cuando Rick Astley apareció en la escena musical pop y con un hit que, por algunos, puede ser perfectamente considerado un himno de la década de ropas fluorescentes y baterías eléctricas: "Never gonna give you up".
El joven Astley nunca pensó que su canción también se convertiría en un hit de culto para los amantes de la cultura kitsch, que ahora dejan sus pies en la pista cuando suena un éxito ochenteno en la discotheque o fiesta de su preferencia.
En conversación con Cooperativa, Astley intentó dilucidar el misterio tras esta potente atracción por esa década: "los ochentas fueron bastante grandes en la melodía de las canciones. Siempre puedes cantar a la par una canción de los ochentas. No se trataba solamente del track o su producción, sino que usualmente el tema tenía que ver con buenas letras y grandes voces, que te hicieran cantarlas".
Pero al mismo tiempo reconoció que la música dance ha cambiado en muchas cosas. "El track se volvió mucho más importante y el asunto ya no radica tanto en lo vocal, sino que en el ritmo. No hay nada mal con eso, es sólo la forma en que se dieron las cosas".
A pesar de este panorama, los ochentas no se desvanecen de la memoria colectiva. Para Astley, el asunto funciona como una retrospectiva constante, ya que "ahora la gente más joven, gracias a internet, van de vuelta hacia allá, a los cincuentas, a los sesentas, los setentas, llegan a los ochentas y descubren cosas nuevas".
"Si escuchas a gente como Lady Gaga o a Katy Perry, que son masivas ahora, están bastante influenciadas por los ochentas. No solamente en cuanto a la música, sino que también en la manera en que se visten", sostuvo el músico.
El hábil y lo interesante
La evolución es natural y no por eso te gusta menos las cosas que van apareciendo. Rick Astley tiene a sus favoritos actuales.
Le llama la atención Bruno Mars, porque "cuando lo ves en vivo te sumerge en el concierto, cada canción tiene su rutina de baile y es muy agradable. Es realmente un hombre del espectáculo".
"Es como James Brown que se encuentra con Prince que se encuentra con no sé qué... No es solamente un compositor hábil, sino que sabe hacer una presentación de sus trabajos", añadió.
Por otro lado, también disfruta lo que hace Avicii. "Realmente me gusta su disco más reciente, tiene gran material ahí. Es muy interesante lo que él hace porque se las ha ingeniado para mezclar la música country con la música bailable. Siempre es atrayente cuando la gente logra hacer eso: unir dos tipos de cosas que son muy diferentes".
Me han Rickrolleado
20 años después de que debutó "Never gonna give you up", la canción fue utilizada para la que es calificada como una de las mayores bromas de internet: cuando intentaban vender una información que podía resultar extremadamente interesante, el link que supuestamente conducía a ella te llevaba al videoclip en Youtube del clásico tema de Rick Astley.
Según describe el mismo cantante, el Rickroll le parecía un poco ajeno porque "yo no pertenezco para nada a la era de internet. La red estaba a millones de kilómetros cuando yo estaba haciendo discos, nadie tenía contemplado que internet existiese de la manera que es hoy. Así que era muy raro pensar que una canción de 25 años atrás tuviese vida nuevamente".
Además, "es extraño cuando algo es bautizado y eso tiene tu nombre. Yo soy el Rick del Rickrollin' y eso es jodidamente raro... Pero no tengo rencor con el tema, porque sólo era algo chistoso. Hay muchas cosas entretenidas que han hecho con la canción".
Igualmente, Astley acepta que aprovechó el momento para ganar dinero, consiguiendo agendar algunas presentaciones en el momento. "Pero no tiene nada que ver conmigo, por eso me gusta. No tuve participación en ello, podría haberse llamado 'dayrollin', como sea, con la canción de otra persona".
A ello se suma que "no he Rickrolleado a nadie. De hecho, creo que sería incapaz de hacerlo. Aunque sí he sido rickrolleado algunas veces. Sí, me lo han hecho. Tengo amigos, qué más puedo decir. Así es la vida... He Rickrolleado a un par de personas en vivo, pero a nadie a través de un correo o un link".
Ser un afiche
Fanáticas adultas o jóvenes, no hay mucha diferencia en las reacciones que tienen cuando están frente a sus ídolos. Histeria, llanto o cualquiera sea su manifestación, para Astley todo está dentro de los márgenes de lo aceptable.
"Puedo entender que tengan recuerdos y que se sientan como la primera vez que escucharon esa canción, cuando iban a los clubs a bailar. Sé lo que significa, porque hay ciertas canciones que suenan en la radio y digo 'oh, hombre, eso es...', eso me recuerda algo, tener 15 o 18, o lo que sea", comentó.
Lo cual complementó apuntando que "cuando tienes esa edad todo es tan nuevo, tan fresco y se siente tan importante, que es difícil recrear eso. Es difícil recuperar lo que tenías cuando eras un adolescente, porque nunca habías visto o sentido eso".
"La música y las películas que te rodean casi se vuelven parte de tu ADN. Si en algún momento fui el afiche en el muro de la pieza de alguien, estoy muy feliz por eso", sostuvo.
Copas de vino tinto
El próximo 5 de abril se producirá una cumbre ochentera en el Movistar Arena, en un espectáculo que fue bautizado como "Hit parade". Allí se reunirán Rick Astley, Debbie Gibson, Samantha Fox y Martika.
Consultado por esta reunión, Astley fue más bien reflexivo, señalando que "obtenemos una forma diferente de placer en estos días. Casi todos los que he conocido que están en mi posición, que tuvieron un par de hits hace un tiempo, son usualmente personas muy tranquilas, con las que puedes tomarte un par de copas de vino tinto después del show, conversar y divertirte. Siendo honesto es algo muy, muy agradable".
Esto "porque cuando éramos jóvenes teníamos tanta presión, tanta competencia entre los sellos discográficos. Todos querían sacar un disco, tratando de tener el mayor hit posible y bla, bla... Ahora es como '¡oye! Estamos aquí para cantar esas canciones y pasarla bien. Eso encaja con mi forma de ser, con cómo soy ahora, mucho más que como solía ser".
Las entradas para "Hit parade" están disponibles a través del sistema Punto Ticket con valores que van entre los 13.700 y los 79.900 pesos.
Aparte de su presentación en el Movistar Arena, Rick Astley también agendó un sideshow que tendrá lugar en el Casino Enjoy de Santiago, para el día 4 de abril a las 22:00 horas. Las entradas cuestan 15 mil pesos la general y 30 mil pesos la VIP, y están disponibles también en Punto Ticket.