El dúo británico actuó ante siete mil personas en el Movistar Arena de Santiago.
Fue la primera presentación en el país con sus miembros fundadores.
A 15 años de su anterior visita, pero por primera vez con su formación original, Tears For Fears celebró sus 30 años de carrera en Santiago, con un repaso por los clásicos que los convirtieron en nombre clave de la escena pop ochentera.
Roland Orzabal y Curt Smith, fundadores del grupo en 1981, se presentaron la noche del viernes acompañados de tres músicos de sesión y dos coristas, para ofrecer una hora y media de show que contentó a las 7.200 personas que llegaron al Movistar Arena de Santiago.
Tras reunirse en el 2003 luego de 12 años de distanciamiento, ambos músicos demostraron su buena forma artística con un repertorio que contempló gran parte de los éxitos esperados por los asistentes.
Desde la apertura con "Everybody wants to rule the world" hasta el cierre con "Shout", la lista de canciones sumó otros esperados títulos como "Sowing the seeds of love", "Change", "Woman in chains" y "Advice for the young at heart".
Junto a un par de composiciones de su más reciente disco de estudio, "Everybody loves a happy ending" (2004), el buen estado vocal de Orzabal permitió también la inclusión de uno de sus covers favoritos: una particular versión de "Billie Jean" de Michael Jackson en formato soul y con arreglos que sorprendieron gratamente al público.
La calidez de ambos miembros del dúo fue la tónica de la jornada, con la interacción espontánea que tanto Orzabal como Smith establecieron con los asistentes durante buena parte del show.
Tears for Fears suma unos veinticinco millones de discos vendidos, mientras siguen realizando presentaciones en todo el mundo. Tras su paso por Chile actuarán en Argentina y Brasil, donde tienen seis conciertos agendados.
