Son acusados por robo agravado, asociación delictual, uso indebido de influencias e incumplimiento de deberes.
Sebastián Leiva apareció fallecido en territorio boliviano.
Cinco policías bolivianos fueron detenidos por sus presuntos vínculos con la venta de un vehículo robado a Sebastián "Cangri" Leiva y Jorge Gundian, quienes fueron hallados muertos en pleno desierto el pasado 24 de febrero tras permanecer varios días desaparecidos.
Según la policía del país vecino, los funcionarios que quedaron en detención provisoria no están relaciones con la muerte de los dos chilenos.
"Estas personas no están relacionadas directamente con la muerte, sino están relacionadas con cuatro delitos: robo agravado, asociación delictual, uso indebido de influencias e incumplimiento de deberes", comentó el fiscal general Juan Lanchipa, según consignó el diario La Razón.
Según el mismo periódico, los investigadores de ambas naciones manejan varias hipótesis, entre ellas el tráfico de drogas, un atraco o el extravío de las víctimas en la zona desértica.
De acuerdo con el reporte del Servicio Médico Legal de Uyuni, Leiva y Gundián murieron tras intoxicarse con una sustancia química desconocida y por hipotermia.
