Entre flores, testamentos y fotos, decenas de fanáticos en Camdem, Londres –entre ellos turistas y residentes– se reunieron en la casa cantante británica, Amy Winehouse, con el motivo de recordarla en el aniversario número 10 desde su muerte.
Un admirador de la artista, Ravi Vyas (26), dejó unas rosas rojas a los pies de una estatua erguida en su honor. "Quiero que la gente la recuerde como la chica del jazz que sobresalió", dijo.
En el caso de Grace Newman (21), recalcó que visitar el lugar forma parte de un panorama de vacaciones: "Ella hizo lo que quiso, nada le molestaba, ella era su propia pasión. Amaba la individualidad que traía", afirmó.
También hubo espacio para reflexionar acerca de la dañada imagen mediática que ha girado en torno a ella y su lamentable final: "Es recordada en el ojo público como una adicta a las drogas. Eso no es para nada lo quedebemos recordar", meditó la joven fanática Reece Fielding (16).
La intérprete de "Back to Black" –cuyos últimos años de vida estuvieron marcados por los excesos, problemas alimenticios y emocionales– falleció el 23 de julio con tan solo 27 años, y la causa fue una intoxicación producida por una letal ingesta de alcohol.