Después de 13 años sin despegar debido a un mortal accidente aéreo, el baterista del grupo Blink-182, Travis Barker (45) finalmente se subió a un avión junto a su pareja Kourtney Kardashian, con quien viajó hacia el Cabo San Lucas, en Baja California.
El vehículo que los llevó corresponde al jet privado de la media hermana de la Kardashian, Kyle Jenner, y quienes también se sumaron al viaje fueron la madre de ellas, Kris Jenner, junto a su novio Corey Gamble.
Este hito corresponde al primer despegue del rockero, después de que en 2008 un fatal accidente lo marcara de por vida.
El jet en el que estaba en ese entonces se descarriló de la pista del Aeropuerto Metropolitano de Columbia, chocó con una reja y terminó con cinco de los siete tripulantes fallecidos, incluidos la piloto, el co-piloto y su guardaespaldas.
Los únicos supervivientes fueron Barker y el DJ que lo acompañaba, Adam Goldstein, aunque terminaron con quemaduras graves. Un año después, Goldstein murió de una sobredosis.
Barker relató que después del siniestro, sufrió un síndrome por estrés postraumático que también lo llevó a dejar las drogas, como una forma de rehabilitación.
Así, en junio de este año, publicó que iba a dejar atrás sus miedos, afirmando que "probablemente viajaría de nuevo", escribió.