"Dark" temporada final: El arte de la confusión
En Cooperativa pudimos ver de manera anticipada la conclusión de la serie y te lo contamos sin spoilers.
En Cooperativa pudimos ver de manera anticipada la conclusión de la serie y te lo contamos sin spoilers.
El comienzo es el final y el final es el comienzo. Esa fue una de las promesas más constantes de la aclamada serie alemana "Dark", que este 27 de junio estrenará su tercera y última temporada. ¿Cumplirá?
En Cooperativa pudimos ver el desenlace de la producción de manera anticipada y, aunque parezca imposible, te contamos nuestras sensaciones sin hacer spoilers.
La segunda temporada culminó con Jonas (Louis Hofmann) siendo rescatado del apocalípsis por una Martha (Lisa Vicari) que decía venir "de otro mundo". Si las relaciones de los personajes y sus símiles en distintas épocas ya era un asunto complejo de digerir, este nuevo aspecto sólo brinda más confusión.
En ese ambiente transcurren los primeros epidosios de este último ciclo de "Dark". Con la narrativa clásica de la serie, el espectador va recibiendo de a poco pequeños bocados de información, que pueden llegar a resultar absolutamente aleatorios y fuera de lugar.
Sin embargo, después de dos temporadas, sabemos que ese es el juego de esta serie. Con un montón de falsos cliffhanger (finales en suspenso), frases ambiguas que abren la especulación y una ambientación perfectamente lograda, "Dark" solo busca desconcertar a sus espectadores, que se deshacen discutiendo teorías sobre la increíble historia de Winden.
Como siempre toda esa confusión desaparece en los últimos episodios, donde no solo se explica lo visto en la primera parte de la temporada, si no que se expande el significado completo de la serie con una asombrosa revelación y una escena final que descoloca y satisface a la vez.
Lo mejor es no caer en la nebulosa de información que planetan los múltiples (más que nunca) viajes en el tiempo y las distintas versiones de los personajes. A diferencia de los dos ciclos anteriores, ahora "Dark" sí brinda un final cerrado (e impensado) que casi no deja huecos en la trama y que no tiene espacio para nuevas teorías.