Maite Phillips, la más reciente eliminada del reality "Gran Hermano", dijo ser víctima de "acoso y bullying" tras su regreso a Chile, por lo que debió interponer denuncias y tomar acciones legales.
La concursante del programa era el "personaje más odiado" por los televidentes y recibió un 90,04% de los votos del público en su contra, con múltiples mensajes criticando su paso por el encierro. Pero ahora, acusa que ese odio se tornó en fuertes amenazas.
"Fue demasiado traumático para mi familia. Hay una familia atrás que le llegan todos los comentarios", señaló en una transmisión en vivo con Nicolás Quesille.
La exparticipante del reality aseguró que "la normalidad que conocía ya no existe. No puedo salir sola de mi casa ni ir a fiestas. Tengo que adaptarme y tomar los resguardos suficientes y necesarios para tomar esto de la mejor manera posible, con la mayor cautela".
"Hay amenazas reales"
Miate Phillips incluso dijo estar pensando en "contratar un guardaespaldas. Para que entiendan la dimensión de las cosas y las palabras que dicen. Del dicho al hecho puede haber mucho trecho, pero tampoco es que me vaya a arriesgar".
"Tienen que entender que hay amenazas reales, hay denuncias reales. Hay denuncias puestas (en Carabineros). Se están tomando todas las cartas en el asunto", señaló la ex "Gran Hermano".
Pese a todo, reveló que no está "leyendo mucho los comentarios, porque sería demasiado el impacto".