Si viste la serie de televisión 'La pequeña casa en la pradera', muy probablemente recordarás la ceguera de la hermana mayor de la familia, Mary Ingalls.
El popular programa de televisión y la serie de libros se basaron en las experiencias de la vida real de Laura Ingalls Wilder. Mary, su hermana, se quedó ciega cuando era adolescente después de contraer la escarlatina o fiebre escarlata, según la historia "oficial".
Sin embargo, un equipo liderado por la doctora Beth Tarini, trabajó durante años en el caso real tras la icónica familia Ingalls.
"Estaba en mi turno de pediatría. Estábamos hablando sobre la fiebre escarlata y yo dije: 'Oh, la fiebre escarlata te vuelve ciego. Mary Ingalls terminó ciega por la misma", recuerda Tarini, quien ahora es profesora asistente de pediatría en la Universidad de Michigan. Mi supervisor dijo, "No lo creo", explica la doctora en una nota publicada por CNN.
Las historias de la familia Ingalls se desarrollaron entre 1974 y 1983.
Esa cotidiana conversación fue el punto de partida de una investigación que llegó a antiguos documentos, cartas escritas por Laura, informes de presa y la revisión de historial epidemológico sobre la ceguera y enfermedades infecciones de fines del siglo XX.
La verdad
En la biografía de Laura, "Pioneer Girl", no había referencia a que Mary tuviera fiebre escarlata el año que se quedó ciega. "Ella nunca menciona la fiebre escarlata. Ella nunca menciona erupciones", dice Tarini, señalando que la erupción es una señal reveladora de la enfermedad.
La doctora se dio cuenta tras su investigación que en aquella época, la gran mayoría de los casos de fiebre escarlata, si es que producían ceguera, lo cual ya era raro, solo eran temporales y desaparecían rápidamente.
Además, los informes de los periódicos sobre la enfermedad de Mary reportan "fuertes dolores de cabeza" y que un lado de su rostro estaba parcialmente paralizado.
Pero, la pieza más importante se encuentra en una carta que Laura le escribió a su hija, Rose. Ahí, hace referencia a "algunos tipos de enfermedades de la columna vertebral". La carta también menciona que Mary consultó con un especialista en Chicago que le dijo que "los nervios de sus ojos estaban paralizados y que no había esperanza".
El diagnóstico real sería entonces: meningoencefalitis viral, la cual causa inflamación del cerebro y los meninges, la membrana que cubre el cerebro. En muchos casos, puede causar inflamación del nervio óptico lo cual puede resultar en una lenta y progresiva pérdida de la visión.
¿Por qué cambiarlo?
¿Por qué Laura cambió la enfermedad de su hermana por escarlata?
Los autores del estudio creen que podría deberse a que ella y sus editores consideraron que sus lectores se sentirían más familiarizados con la fiebre escarlata, enfermedad que es mencionada en otros libros de la época, como "Mujercitas" y "Frankenstein".
Según la doctora e investigadora la lección es que la enfermedad es fácilmente tratable.
Pero dado que la referencia cultural a la enfermedad está profundamente arraigada, la gente asume que es muy peligrosa. "La gente lee como niños que la fiebre escarlata te provoca ceguera", dice Tarini. "Los padres se ven preocupados... así que tengo que desmentir eso en la clínica", finalizó.