[REVIEW] "Halston" de Netflix: como una fallida prueba de vestuario

Cinco episodios forman "Halston", una miniserie enfocada en la obra del famoso diseñador de moda, encarnado por Ewan McGregor, que tiene tantos elementos que al final terminan por estropear una buena idea.

La figura del diseñador y su trabajo, el legado de su apellido, se intenta retratar con un ambicioso proyecto que tuvo a cargo al aplaudido Ryan Murphy (el creador de "Glee", "AHS" y "Pose"), pero el resultado no está a la altura de los trabajos que han llevado su nombre en los créditos.

El problema con "Halston" no es con McGregor, menos con el diseño de producción (siempre es bueno ver la recreación de los '70) ni tampoco con la idea de mostrar la vida privada de un personaje tan interesante como Halston: la mayor dificultad al ver esta serie es que parece desordenada, sin un rumbo y nunca demuestra por qué el diseñador llegó a ser lo que es en el mundo de la moda.

Aunque tiene puntos interesantes en sus cinco capítulos (como su amistad con Liza Minelli y su colaboración con Martha Graham), no llega a encender el entusiasmo. Se pierde el interés ya en el segundo capítulo y solo se desenvuelve con hitos como Studio 54, su adicción a las drogas y flashbacks, más por cumplir que por intentar sorprender.

Más aún, dificulta tomarle peso a un proyecto de tal envergadura cuando el título de la serie sea Halston y la trama sea sobre su trabajo, y no se explique o no se exponga lo que significa "Halston" para la historia de los últimos 40 años. ¿Qué hizo que se transformara en una figura icónica? ¿Cuál es la esencia de lo que hizo? ¿Dónde está el valor intangible de su obra? Nada de eso.

Al principio, en sus primeros momentos, se muestra los intentos de Halston de ser reconocido pero no logra vender sus diseños ni menos que lo conozcan. Esta serie tiene el mismo problema, con las mejores ideas de Murphy y su equipo, pero los cinco episodios que la componen no logran llamar la atención.