"Mektoub, My Love: Intermezzo" dura más de tres horas y media y abusa de cuerpos femeninos en pantalla.
Una escena de sexo oral de 20 minutos generó polémica por su detalle.
Abdellatif Kechiche es un cineasta provocador al que siempre acompaña la polémica, pero si en películas anteriores su provocación tenía un sentido, en "Mektoub, My Love: Intermezzo" es simplemente el vacío.
Presentada a competición en Cannes, las tres horas y media del filme son una sucesión de planos de traseros de chicas jóvenes y un explícito cunnilingus (sexo oral a una mujer) de 20 minutos. No hay casi historia ni planteamiento estético o narrativo.
Son muchos minutos de sexo oral con la cámara sin parar de filmar primeros planos y hasta el mínimo detalle. Todo ocurre en el baño de una discoteque.
La periodista francesa Anaïs Bordages publicó un tuit con los planos de traseros que se había molestado en registrar: "Hay 178. Si se eliminaran, creo que la película duraría una 20 minutos", escribió.
Fue tanto el exceso de cuerpos femeninos y escenas explícitas que en la première de gala, muchos espectadores abandonaran la sala de proyección. "Es porno, no había otra que irse", comentó un espectador, según consigna La Vanguardia.
"Para mí lo más importante era celebrar la vida, el amor, el deseo, la música, el cuerpo y contar una experiencia cinematográfica la más viva posible e intentar renovarme, buscar otras forma de narración tratando de romper las reglas narrativas del cine", explicó Kechiche.
El realizador franco-tunecino criticó a un periodista por tomarle fotos con un teléfono, se negó a contestar cuestiones simples como su forma de rodar el filme y terminó calificando de "pregunta imbécil y desfasada" la referente a una demanda de agresión sexual presentada en su contra.
