Sigourney Weaver: "Ha sido un año español maravilloso"
La actriz "Red lights" en 2011 con Rodrigo Cortés en Barcelona.
Criticó que le "damos demasiada importancia a Hollywood".
La actriz "Red lights" en 2011 con Rodrigo Cortés en Barcelona.
Criticó que le "damos demasiada importancia a Hollywood".
Sigourney Weaver rodó "Red lights" en 2011 con Rodrigo Cortés en Barcelona, donde se sintió "catalana por unos días", estrenará en abril el thriller rodado en Madrid "The cold light of day", y ahora que Pedro Almodóvar prepara un guión en inglés, aseguró que le enviará un mail. "Tengo que intentarlo", aseguró.
"Ha sido un año español maravilloso", aseguró la actriz que, también recuerda, le echó un cable a su amigo Ridley Scott cuando se quedó sin Isabel la Católica para "1492: La conquista del paraíso" y acabó siendo "reina por un día", rodando en Salamanca y Sevilla.
"Debería aprender español, me encanta la gente allí. Es simpática y muy graciosa. Adoro especialmente Barcelona", prosigue esta fan incondicional de Almodóvar. "Es un hombre estupendo. ¿Puedes avisarme, por favor, si necesita a una actriz estadounidense?", preguntó.
La actriz, después de haber alcanzado la gloria en la tetralogía de "Alien", formar parte de los "Ghostbusters" y renacer para Hollywood en el planeta Pandora de "Avatar", se encarga ahora de desenmascarar cualquier rasgo sobrenatural en "Red lights".
En la película, que se estrena el 2 de marzo en España, encarna a "Margaret Matheson", "una mujer realmente interesante, brillante y excéntrica en su pasión por este campo paranormal" quien, junto a Cillian Murphy, intenta encontrar la trampa al parapsicólogo interpretado por Robert De Niro.
La importancia de HollywoodHace ya tiempo que Sigourney Weaver no tiene Hollywood entre sus grandes prioridades. "Damos demasiada importancia a Hollywood. Cada actor debe decidir cuánto negocia con la industria, pero creo que lo bueno de nuestro trabajo es que las mejores cosas pueden aparecer sin más, como me pasó con Rodrigo Cortés", aseguró.
"Red lights", que ha polarizado las reacciones en Sundance, le gusta precisamente por eso: "No te lleva de la mano y te sobreprotege como otras películas de Hollywood. Te deja en un limbo, con más dudas incluso de las que tenías cuanto entraste en el cine", aseveró.
Nominada tres veces al Oscar -por "Aliens", "Gorilas in the mist" y "Working girl"- no echa de menos estar en la primera línea de los grandes estudios, pues eso le ha permitido alternar con cintas como "La tormenta de hielo", por la que ganó el BAFTA -"ya tengo un Oscar inglés", bromeó-, "A map of the world" o "Rampart".