Su talento arrancó aplausos y dejó totalmente satisfechos a los asistentes a la velada.
Protagonizó un show de una hora y media que incluyó una reversión de "Leyla".
Más de una hora y media de show de alto nivel fue el que brindó Eric Clapton la noche de este domingo ante un Movistar Arena dispuesto con sillas en sus localidades más exclusivas.
Bastó que apareciera sobre el escenario para que el público se pusiera de pie y se entregase a los pies del artista, sabedores de estaban frente a una leyenda viviente de la música.
Con la sobriedad que lo caracteriza, dio instrucciones a su banda soporte y sin más se lanzó con una verdadera clase virtuosismo frente a la guitarra, donde sus rápidos y prodigiosos acordes ensamblaban perfectamente con el sonido del bajo, batería, piano , teclado y dos coristas que lo secundaban.
Pese a que recorrió la misma lista de temas que presentó en Brasil y Argentina, su reencuentro ante el público chileno estuvo lejos de ser un show mecánico.
La prueba contraria vino desde el inicio, donde un Clapton alejado de cualquier aspaviento habló con la destreza de sus manos por intermedio de temas como "Key to the highway", "Tell the truth" y "Old love".
La mayor parte de la gente que copó el sector VIP se mantuvo de pie durante esos dos primeros temas, pese a los pedidos de un grupo minoritario y las recomendaciones de la seguridad local para que sentaran en los asientos dispuestos en dichas ubicaciones.
Recién avanzado el espectáculo, el público se sentó a seguir con mirada atenta cada uno de los riff del hombre que dictó una cátedra de blues, rock and roll y R&B, ni importando si era con alguna de sus dos guitarras eléctricas o la electroacústica que utilizó a gran nivel en "Driftin' blues".
Para arrancar aplausos tampoco necesitó de frases grandilocuentes sobre el público tenía enfrente -sólo uno que otro gracias en inglés y español-, sino que ello ocurrió de manera natural frente a "Badge" y con un Clapton jugando con el pedal asociado a su guitarra.
También fue osado al incluir los temas que él le interesa mostrar y si se trataba de clásicos como Leyla, revistarlo y darle un nuevos air.
"Cocaine" fue el penúltimo tema de la jornada, pero debido a la gente quería más Clapton volvió a escena y cantó "Crossroads", para luego poner fin a su tercera visita a Chile, que por supuesto quizás no fue lo numerosa que se esperaba inicialmente, pero donde una vez más al público le quedó claro que hay pocas figuras del nivel de "mano lenta", si se trata de dialogar y transmitir sensaciones por medio de una guitarra.
La lista de canciones
