The Rolling Stones volvió a los escenarios tras laringitis que afectó a Mick Jagger
La banda británica se presentó la noche del domingo en Londres ante unos 50.000 enfervorizados fanáticos, testigos de la total recuperación del vocalista.
La banda británica se presentó la noche del domingo en Londres ante unos 50.000 enfervorizados fanáticos, testigos de la total recuperación del vocalista.
La voz de Mick Jagger demostró estar en perfectas condiciones en el concierto que The Rolling Stones ofreció la noche del pasado domingo en el estadio londinense de Twickenham, primer show de la banda tras la cancelación de las dos actuaciones previstas en España.
El vocalista de las leyendas británicas del rock, Mick Jagger, subió al escenario y cantó sin problemas tras la afección a la laringe que impidió al grupo presentarse la semana pasada en Valladolid y El Ejido.
Tras esta obligada pausa, que dejó profundamente decepcionados a cerca de 90.000 fanáticos españoles que habían comprado entradas para ambos eventos, The Rolling Stones reapareció en los escenarios con un auténtico "big bang" visual y musical, que arrolló a los cerca de 50.000 seguidores congregados en el estadio de rugby.
Aunque hubo preocupación por las condiciones meteorológicas, para dicha de los intérpretes de "(I can't get no) satisfaction", la temida lluvia sólo se hizo presente 10 minutos antes del concierto, pero desapareció enseguida.
Las gotas no alcanzaron a enfriar el ánimo de la enfervorizada multitud, que incluía a jóvenes, adultos y niños, y por el contrario, exacerbaron hasta el clímax colectivo al público, cuando The Rolling Stones apareció en escena con el tema "Jumping jack flash".
Durante las casi dos horas sin interrupción de show, el grupo ofreció un espectáculo donde además de presentar sus más clásicos éxitos, como "Star me up", hubo cortes de su último trabajo discográficom "A bigger bang", considerado por muchos como el mejor álbum de estudio de la banda británica en muchos años.
El guitarrista Keith Richards, de 62 años; el cantante Mick Jagger, de 63; el guitarrista Ronnie Wood, de 59; y el percusionista Charlie Watts, de 65, hicieron alarde de su mejor música en una actuación llena de guiños de complicidad entre ellos, donde demostraron estar en plena forma.
Un escenario móvil que se acercaba al público, una pantalla gigante y fuegos artificiales contribuyeron a realzar el espectáculo.
Además, el guitarrista Keith Richards cantó dos temas, disipando cualquier duda acerca sobre su recuperación tras la operación luego de golpearse la cabeza al caer de un árbol en las islas Fiji en abril pasado, y que obligó a cancelar algunos recitales de la gira.
The Rolling Stones actuará nuevamente la noche de este lunes en Londres, y después se marcharán a Glasgow (Escocia), Sheffield (norte de Inglaterra) y Cardiff (Gales).
La gira por el continente europeo acabará el próximo 3 de septiembre en Dinamarca, tras lo cual el grupo emprenderá viaje a Estados Unidos. (EFE)