El intérprete de "Control total" fue acusado anteriormente de agresión física, sexual y mental.
"Estoy en la tribu de los jodidos. Soy un pecador muy público", relató.
El actor Shia LaBeauf aceptó responsabilidad de crímenes ocurridos en el pasado, e hizo una instrospección con respecto a sus nocivos comportamientos con los que va "a estar en deuda el resto de mi vida".
Específicamente, se refirió a las acusaciones por parte de su expareja en 2020, la cantante británica FKA Twigs, a quien abusó sexual, físicamente y mentalmente: "Hice daño a esa mujer", dijo, a quien le trasmitió, a sabiendas, una enfermedad de transmisión sexual.
En la misma línea, LeBeouf admitió haber sido "un ser humano que buscaba el placer, egoísta, egocéntrico, deshonesto, desconsiderado y temeroso" y que además hirió "a muchas otras personas antes que ella.
"La he cagado mucho, como si fuera una mierda que se estrella", aseveró el intérprete de "Control total", y añadió que existe una "larga lista de gente a la que tengo que enmendar".
Con un prontuario delictual que incluye también arrestos por robos y por conducta desordenada, el hombre pensó en quitarse la vida. "Fui y cargué una pistola y me senté en mi mesa", recordó. "Me iba a suicidar".
Pese al "mea culpa", el actor se demarcó de celebridades que han cometido abusos: "Necesito ser útil. Y cuando miro este entorno #MeToo, no hay muchos tipos que estén asumiendo la responsabilidad".
