A propósito de la hospitalización de urgencia de Ana María Muñoz, más conocida como la "Zapallito italiano" en el mundo televisivo, una de sus amigas más cercanas, Stefanía Oyarzún, acusó que "Diagnóstico" de Canal 13, programa a través del cual la mujer se puso una banda gástrica para bajar de peso, no hizo un seguimiento médico adecuado para el caso.
Muñoz ingresó al Hospital El Pino de San Bernardo el jueves pasado con fuertes dolores abdominales, contó a Cooperativa Oyarzún. "Llegó sola al hospital, muy mal. Luego el día sábado también estuvo muy complicada. La operaron (el lunes), le sacaron la banda gástrica que estaba en el esófago. Eso hacía que Anita no pudiera consumir ningún tipo de alimento".
"Ella creía que era algo normal de la banda. De hecho, muchas veces había ido al médico y la devolvían a la casa. Le ponían Viadil" y retornaba a su hogar, añadió.
Así fue que Oyarzún apuntó que "a ella la operaron y se olvidaron. No hubo una preocupación constante del programa o algo así".
Ahora, tras el procedimiento de extracción, "ella ahora está mucho mejor. Gracias a Dios está estable, igual la tienen en observación evaluando si es que tiene hemorragia interna, entonces están como en exámenes".
En tanto, Mario Ferrario, el cirujano digestivo de Clínica Las Condes que le practicó la intervención a Muñoz, apuntó a través del Departamento de Comunicaciones del establecimiento que tras la operación nunca volvió a saber de la paciente.
"Ya no se hace en Chile"
El médico del Centro de Obesidad de la Univerisdad Católica, Camilo Boza, explicó que "la banda gástrica es una técnica que se empezó a hacer aquí alrededor de unos nueve o 10 años y que tenía la gran ventaja de que era poco invasiva, no generaba tanto problema en el sentido de que inicialmente era bastante simple de hacer".
"Pero con el tiempo nos dimos cuenta de que efectivamente no era así y que tenía muchas otras complicaciones. Y la banda gástrica en Chile ya prácticamente no se hace, porque justamente produce una mala calidad de vida. Esto entendido como que muchas veces ésta se puede deslizar, que es lo que probablemente ocurrió", dijo.
Este anillo que se pone alrededor del estómago "a largo plazo, va produciendo el problema de que lo empieza a estrangular y va provocando que la persona tenga más intolerancia a la alimentación".
Consultado por el procedimiento de extracción, Boza dijo que "sacando la banda, la persona recupera su funcionamiento normal y una vez que se desinflama el estómago y si la persona es capaz de haber asumido un cambio de hábito en alimentación, ejercicio, control de ansiedad y apoyo sicológico, muchas veces no es necesario hacerse otro procedimiento , porque la persona ya ha bajado todo lo que tiene que bajar".