Mega rechaza demanda de Paulina de Allende-Salazar: la acusan por "acoso laboral"
La periodista demandó al canal tras su despido el pasado abril.
La periodista demandó al canal tras su despido el pasado abril.
A meses de la polémica, Mega respondió a la demanda interpuesta por Paulina de Allende-Salazar tras su despido el pasado abril, presentando duros descargos contra la periodista.
En la querella presentada por la comunicadora, donde acusa a la señal de "invisibilizar su desempeño profesional", exige una indemnización de $420 millones y disculpas públicas en el matinal "Mucho Gusto", espacio donde la profesional utilizó la expresión "paco" para referirse a Daniel Palma, mártir de Carabineros asesinado en un operativo policial.
De acuerdo Glamorama, el canal rechazó la demanda argumentando que, el 6 de abril, a las 8:27 am, "estando en vivo y a disposición de toda la opinión pública, la demandante utilizó un lenguaje completamente inapropiado y denigrante para referirse a la víctima de Carabineros de Chile".
Asimismo, la estación televisiva señaló que esta acción fue "una seria infracción a las reglamentaciones internas del empleador y que la demandante se había comprometido a respetar. Entre ellas, las que el propio contrato de trabajo señala. Esto es, el respeto a las buenas costumbres, la moral y las Orientaciones Programáticas".
En la respuesta, la señal del Grupo Bethia reveló además que, en 2022 la comunicadora fue acusada de acoso laboral, siendo sancionada por escrito y recibiendo una advertencia de parte del canal.
Según el portal de La Tercera, la investigación concluyó "la forma de comunicar instrucciones y supervisión por parte de la periodista genera menoscabo, humillación e inseguridad profesional, y más aún cuando no cumplen sus expectativas", transmitiendo además "una actitud de superioridad, de estar sobre cualquiera en su ámbito profesional y lo va verbalizando cada vez que interactúa con otros".
Ante estas denuncias, el abogado Joaquín Cabrera, que representa a de Allende-Salazar afirmó que "esa acusación no es veraz ni está ratificada por ninguna autoridad laboral competente. Además, está lejos de los fundamentos planteado por Mega en la carta de despido".
"No quiero pensar que es un nuevo intento por denostar y amedrentar a una profesional de excelencia que solo está ejerciendo su derecho; el mismo que todo trabajador debiera poder reclamar sin represalias y amenazas encubiertas", manifestó.