El principal ingrediente del "terremoto" tiene una protección especial por parte de SAG.
Si tiene 11,5 o más grados, no es pipeño.
Las Fiestas Patrias no son tales sin "terremotos", y para preparar este brebaje es fundamental el pipeño, que tiene una clasificación particular por parte del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), que protege "su identidad cultural y territorial", así como "su valor como un producto tradicional y distintivo de la agricultura familiar campesina".
Así, a días de las celebraciones, el SAG recordó que el pipeño es "una bebida alcohólica auténtica, característica de las regiones del Maule, Ñuble y Biobío".
Así, legalmente el vino pipeño debe cumplir con la definición legal de vino, es decir, debe tener una graduación alcohólica mínima de 11.5 grados.
En tanto, el pipeño es una bebida parcialmente fermentada de uva que presenta un contenido de azúcar residual, lo que le confiere su dulzor natural y que su graduación alcohólica siempre será inferior a los 11.5 grados.
Por ello, recuerda el SAG, "el pipeño no puede ser adulterado debido a las estrictas normas enológicas que rigen su producción. La resolución establece que la bebida se elabora exclusivamente a partir de la fermentación parcial del mosto de uvas frescas, sin permitir la adición de agua ni azúcares externos para modificar su graduación alcohólica o dulzor".
"Es fundamental entender que, mientras el pipeño no es considerado vino bajo la normativa actual, el vino pipeño sigue existiendo como una categoría separada, afecto a la normativa vigente para vinificación y elaboración del vino, y con una producción que puede realizarse a nivel nacional por cualquier razón social", agregó el servicio.
