Matanza y exportación de productos derivados de este animal ha crecido de forma exponencial durante el año.
Los fuertes olores y la contaminación de pozos de agua han llevado a la población a protestar contra la "masacre" de cientos de asnos.
Durante el último año se vendieron cerca de 65 mil piezas de piel de burro al país asiático.
Las autoridades de Burkina Faso prohibieron la exportación de burros para evitar la sobreexplotación de esta especie ante su creciente comercio hacia países como China, donde se les atribuye propiedades medicinales, confirmaron fuentes gubernamentales.
Los burros han sido sacrificados a un ritmo sin precedentes en los últimos meses para obtener su piel en este país de África Occidental, que cuenta con una población de cerca de un millón 300 mil habitantes.
La matanza y exportación de productos derivados de este animal hacia China ha crecido de forma exponencial durante el último año, cuando se vendieron cerca de 65 mil piezas de piel al país asiático, según datos del Gobierno burkinés.
"Esta cifra procede de mataderos oficiales", apuntó a la agencia Efe el técnico del Ministerio de Medio Ambiente Christophe Bazie.
Bazie trabaja en Balole, un municipio situado a 25 kilómetros de Ouagadougou, la capital, donde los fuertes olores y la contaminación de pozos de agua han llevado a la población a protestar contra la "masacre" de cientos de asnos en mataderos privados.
Para frenar su sobreexplotación, el Gobierno burkinés aprobó un decreto en el que regula la matanza de estos animales y su exportación, "junto a todos sus productos derivados", ya que los burros son ampliamente utilizados para el transporte de mercancías y en el sector agrícola del país africano.
El Ministerio de Recursos Animales burkinés también ha prohibido la venta de piel de caballos y camellos, decisión con la que "el Gobierno quiere proteger estas especies", explicó a la agencia Efe el veterinario jefe del Ministerio, Adama Maiga.
