Hissene Habré es pedido por la justicia de Bélgica por crímenes contra la humanidad cometidos durante su gobierno en Chad, entre 1982 y 1990.
El tribunal de Senegal que analizaba la posible extradición a Bélgica del ex dictador chadiano Hissene Habré, conocido como el "Pinochet de Africa", se declaró incompetente para decidir sobre este caso, informaron fuentes vinculadas con la causa.
El expediente fue devuelto al Ministerio Público, a fin de decidir los nuevos pasos, agregaron las fuentes. Los abogados de Habré consideraron la decisión como una victoria para su defendido y dijeron que prueba "la independencia y dignidad" de la justicia.
La justicia de Bélgica quiere procesar a Habré por crímenes cometidos contra la humanidad, amparándose en leyes de aplicación universal que permiten a los tribunales de ese país juzgar crímenes contra la humanidad al margen de donde hayan sido cometidos.
Habré, de 63 años, se encuentra detenido desde el pasado día 15 en el pabellón penitenciario del hospital "Aristide Le Dantec" de Dakar, que acoge a los detenidos cuyo estado de salud no permite su reclusión en la prisión central de la ciudad.
El ex dictador gobernó en Chad entre 1982 y 1990. Su régimen fue acusado por sus sucesores de 40.000 asesinatos políticos y 200.000 casos de torturas, lo que le valió su apodo relacionado con el ex gobernante de facto chileno.
Habré llegó a Dakar (procedente de Camerún) en 1992, dos años después de que tuviera que abandonar precipitadamente Yamena, la capital de Chad, que estaba bajo el ataque de los rebeldes encabezados por Idriss Deby, el actual presidente del país.
El entonces gobierno socialista senegalés encabezado por Abdou Diouf, visiblemente molesto por la presencia de Habré, le concedió asilo político, lo que suscitó sólo tibias protestas por parte del nuevo régimen chadiano. (EFE)
