El gobierno de Nigeria descartó que las más de 200 niñas secuestradas por la milicia radical Boko Haram permanezcan en el bosque de Sambisa, refugio y base de operaciones del grupo armado, por lo que sospecha que pueden haber sido divididas en varios grupos distribuidos por todo el país.
"No hay indicios que demuestren que nuestras niñas están todavía en el bosque. Tampoco hay indicios de que hayan sido sacadas fuera del país", manifestó el ministro de Información, Labaran Maku, en una entrevista con el diario local The Punch.
Las labores de búsqueda del Ejército nigeriano, apoyado por la ayuda internacional, se han centrado en el bosque de Sambisa, en el estado de Borno, donde se sospechaba que fueron llevadas las menores tras el secuestro.
Al no encontrar ninguna pista que demuestre que puedan estar en esa zona, el ministro señaló que "hay posibilidades de que las niñas hayan sido divididos en grupos y que se encuentren en varias zonas del país" y negó las informaciones que aseguran que las niñas han sido trasladadas fuera de Nigeria.
El ministro aprovechó la entrevista para instar al gobierno federal a que negocie con Boko Haram la liberación de las niñas secuestradas en una escuela de Chibok el pasado 14 de abril, aunque reconoció que es "difícil" luchar contra los miembros del grupo.
El pasado sábado, Nigeria y sus cuatro países vecinos (Níger, Chad, Togo y Benín) acordaron declarar la guerra al grupo terrorista, para lo que contarán con el respaldo de Francia, Estados Unidos y el Reino Unido.