Al menos 23 civiles murieron y más de 60 resultaron heridos de distinta gravedad en un ataque "deliberado" del grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) contra barrios de la ciudad de Al Fasher, el último reducto del Ejército de Sudán en Darfur, informó este domingo una organización vecinal de la zona.
Los denominados comités de resistencia de Al Fasher, que realizan un recuento de víctimas en la guerra de Sudán, indicaron en un comunicado que el "bombardeo deliberado" de las FAR tuvo lugar el sábado por la tarde y tuvo como objetivo diversos barrios densamente poblados de la capital del estado de Darfur Norte.
Una fuente anónima de las Fuerzas Conjuntas sudanesas - integradas por el Ejército y grupos tribales de Darfur - dijo a EFE que los paramilitares lanzaron "un gran número de proyectiles de artillería" que alcanzaron viviendas civiles y un centro sanitario en el barrio de Tembasi, en el sur de la ciudad.
El ataque, que provocó una "gran destrucción" en las zonas de impacto, fue dirigido también contra la comandancia de la Sexta División de Infantería de las Fuerzas Armadas sudanesas, según el informante.
El Ejército, por su parte, informó este domingo en un comunicado que repelió otro ataque a gran escala en Al Fasher, localidad asediada por los paramilitares desde principios de mayo y la única en manos del Ejército en Darfur, el principal bastión de las FAR en Sudán.
Según un comunicado castrense, las Fuerzas Conjuntas causaron "grandes pérdidas humanas y materiales" entre las filas de los paramilitares, mientras que apuntó que "decenas" de combatientes fueron capturados y abatidos, como fue el caso del comandante de las FAR Musa Hamdan.
La guerra en Sudán estalló el 15 de abril de 2023 y se ha saldado ya con entre 30.000 y 150.000 muertos, según diferentes estimaciones, mientras que ha obligado a más de 10 millones de personas a abandonar sus hogares, convirtiendo al país africano en la peor crisis de desplazamiento del planeta, según la ONU.