La alta comisionada ONU dijo que "los responsables del uso excesivo de la fuerza deben ser llevados ante la Justicia".
Afirmó que el actuar de los ciudadanos que han liderado las protestas de los últimos meses en el país africano "han sido una inspiración".
Según la oposición, la violencia en Jartum ha causado al menos 13 muertos.
La alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, condenó este lunes la represión contra manifestantes que acampaban en Jartum, Sudán, donde han muerto al menos 13 personas, según la oposición
"Condeno totalmente el uso excesivo de la fuerza en los campamentos de protesta", señaló en un comunicado la ex Presidenta, quien añadió que las manifestaciones pacíficas organizadas en Sudán en los últimos meses "han sido una inspiración".
"El uso excesivo de la fuerza debe ser investigado de forma independiente y sus responsables han de ser llevados ante la justicia", afirmó la alta comisionada.
#Sudan: We deplore the use of live ammunition in protest camps, targeting #peaceful protestors who have been an inspiration over the past months. We call for a swift transition to a civilian administration, #justice & an end to impunity.
— UN Human Rights (@UNHumanRights) June 3, 2019
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Bachelet afirmó que los incidentes constituyen "un paso atrás" y subrayó que "las violaciones a los derechos humanos que han marcado la historia de Sudán, y han desatado las protestas de los últimos meses, no deben continuar"
"Urjo a las fuerzas de seguridad a terminar con este tipo de ataques y garantizar el acceso seguro y sin limitaciones al cuidado médico para todos", añadió Bachelet, que pidió a las autoridades que trabajen en la transición hacia un gobierno de civiles.
Los manifestantes llevaban acampados a las puertas de la sede del Ejército desde principios de abril, primero para pedir la dimisión del dictador Omar al Bashir y, después de su derrocamiento, para exigir a los generales que entreguen el poder a un Gobierno civil.
