La Audiencia provincial de Berlín condenó a siete años de cárcel a un galerista chileno por el asesinato, en junio de 2015, de una turista noruega, quien apareció muerta en el interior de una maleta en el río que cruza la capital alemana.
El condenado, de 39 años, fue hallado culpable de haber acuchillado hasta la muerte a principios de junio de 2015, en su galería de arte en Berlín, a una joven de 36 años con la que mantenía una relación meramente sexual, según la sentencia.
La reconstrucción judicial de los hechos apunta que, durante una pelea, el chileno asestó varias puñaladas a la noruega y, una vez muerta, la metió en una maleta, que posteriormente introdujo dentro de otra valija mayor.
A continuación, y con la ayuda de un cómplice del que no se aportaron detalles, el condenado transportó esa maleta en el tren de cercanías circular hasta el parque de Treptow y, con la ayuda de un carro de la compra, trasladó el equipaje hasta la orilla del río Spree.
Allí lanzaron la maleta al agua, añadiéndole otro soporte, con el objetivo de favorecer que se hundiese. El asesino y su cómplice regresaron entonces a la galería donde trataron de eliminar todas las pruebas del crimen, según la reconstrucción de los hechos.
El 13 de junio por la mañana, un vecino de Berlín descubrió la maleta flotando y la arrastró hasta la orilla, para descubrir el cuerpo de la joven en su interior.
La policía alemana fue inmediatamente alertada y, gracias a un anillo que llevaba la víctima, pudo establecer con celeridad su identidad y, posteriormente, vincularla con el galerista chileno, al que al parecer había conocido poco antes.
Para entonces, el chileno había huido de Berlín y se había trasladado a México, donde fue arrestado y extraditado a Alemania.
La Audiencia Provincial de Berlín ordenó, junto a la pena de prisión, que el condenado se someta a un proceso de desintoxicación, ya que durante el proceso aseguró que cometió el crimen bajo la influencia del alcohol y las drogas.