La terminal sería emplazada en una cuenca binacional, proyecto que se conoce en medio del litigio que ambos países mantienen por la instalación de una papelera de la finlandesa Botnia.
El gobierno argentino solicitó a Uruguay que informe sobre un puerto que la empresa anglo-australiana Río Tinto planea construir en ese país, en medio del litigio entre ambas naciones por la instalación de una papelera de la finlandesa Botnia.
La cancillería pidió a la administración uruguaya que brinde datos acerca del puerto de exportación internacional que proyecta edificar la minera a orillas del río Uruguay, una cuenca de administración compartida que divide a ambos países, precisó el diario La Nación.
La presentación fue realizada ante la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU), ente del que participan las dos naciones.
Para llevar adelante el proyecto, la empresa adquirió terrenos en el departamento uruguayo de Soriano, donde planea construir un puerto para exportar el hierro que produce en una mina de Brasil e importar carbón mineral para otras 16 compañías que posee en ese país.
Sin embargo, la titular de la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama) de Uruguay, Alicia Torres, aclaró que el gobierno de Tabaré Vázquez aún no brindó a Río Tinto la autorización necesaria para edificar el puerto, que demandará una inversión estimada de 205 millones de dólares.
El gobierno argentino advirtió los planes de la compañía de montar este proyecto "a través de un portal de internet del departamento de Soriano", indicaron fuentes oficiales.
Ante la petición argentina, los portavoces señalaron que el gobierno de Vázquez respondió que "una vez que el Estado resuelva internamente respecto de esa iniciativa, Uruguay realizará la comunicación a la CARU en cumplimiento de lo dispuesto por el estatuto del río Uruguay".
"Ante la CARU no hay informes porque cuando no hay nada aprobado, como es el caso del proyecto de Río Tinto, no hay nada que consultar, porque no existe nada. Las ideas no se pueden consultar", aseguró Torres.
Aunque, fuentes diplomáticas argentinas, consideraron que el estatuto del río Uruguay indica que los países deben informar y realizar la consulta previa a cualquier proyecto.
El pedido de informes se realizó en medio del peor conflicto en décadas entre ambos países a raíz de la construcción de una planta de celulosa de la finlandesa Botnia en la localidad de Fray Bentos, también a la vera del río Uruguay.
El litigio, que se dirime en la Corte Internacional de Justicia de La Haya, se agudizó en noviembre pasado cuando entró en funcionamiento la papelera, considerada por Argentina de riesgo para el medio ambiente. (EFE)
