El expresidente argentino Alberto Fernández aseguró que el hematoma que sufrió en uno de sus ojos su exesposa Fabiola Yáñez, que lo denuncio por violencia física y hostigamiento, se debió a "un tratamiento estético contras las arrugas" y descartó haberla golpeado.
En el adelanto de una entrevista en el sitio El Cohete a la Luna, del periodista Horacio Verbitsky, el exmandatario se defendió de la denuncia en su contra y afirmó que era "ella le pegaba a él durante las discusiones que admite frecuentes por el estado de salud de su esposa. Al defenderse él la tomaba de los brazos, lo cual explicaría los moretones".
"El expresidente alega que el hematoma no se debe a un golpe, sino a un tratamiento estético contra las arrugas", citó el medio.
Asimismo, se indicó que Fernández habría conservado chats con la madre de Yáñez, en la que hablarían sobre la preocupación por el alcoholismo de ella, y "reitera en forma obsesiva varias preguntas". Y el exmandatario se cuestiona: "Si soy un golpeador, ¿por qué se sometió a un tratamiento de fertilidad para que tuviéramos un hijo?".
Fabiola Yáñez, de 43 años, decidió el pasado 6 de agosto impulsar una denuncia contra el expresidente después de que la Justicia argentina, en el marco de una investigación por supuesto tráfico de influencias del exmandatario, hallara en un teléfono móvil de una secretaria de Fernández conversaciones e imágenes que indicarían la posible comisión del delito de "lesiones leves en contexto de violencia de género" a la expareja del político peronista, de 65 años.
Tras la denuncia, el juez federal Julián Ercolini prohibió a Fernández salir de Argentina y le ordenó no acercarse ni contactar por ninguna vía con Yáñez, quien manifestó estar padeciendo "terrorismo psicológico" por parte de Fernández.
El juez también solicitó al Gobierno de Javier Milei cambiar y reforzar la custodia policial que tiene asignada Yáñez, quien actualmente reside en Madrid con su hijo Francisco, de 2 años.