El turismo en la zona costera de Argentina sigue adelante a pesar que desde el lunes la mayoría de municipios de la provincia de Buenos Aires deberán encarar restricciones por el aumento de casos de coronavirus.
Este sábado, playas como las del Mar del Plata, la localidad costera más visitada, se veían colmadas de personas, y como se viene dando desde el comienzo del verano, sin respetar las medidas de distanciamiento social.
Ayer, con el fin de frenar los repuntes de covid-19, el Gobierno de Alberto Fernández emitió un decreto en el que recomendó a los gobernadores provinciales restringir la circulación nocturna si así lo requiere la situación epidemiológica.
La provincia de Buenos Aires, con las playas más solicitadas, anunció los cambios que implementará a partir del próximo lunes.
En los municipios que se encuentran en fases 3 y 4 -como es el caso de Mar del Plata y otros puntos clave como Villa Gesell, Pinar y Necochea- se suspenderá entre las 01:00 y 06:00 de la madrugada toda actividad comercial, artística, deportiva, cultural, social y recreativa, salvo actividades manufactureras, agropecuarias y consideradas esenciales.
También se deberán reducir las actividades sociales, recreativas y familiares a grupos de hasta 10 personas en espacios cerrados y abiertos, se restringirá el uso de transporte de pasajeros urbano a personas que se dediquen a tareas esenciales y se reforzarán los controles para disminuir la circulación de personas en horarios nocturnos y evitar la realización de actividades no permitidas.
FUERTE AUMENTO DE CASOS
La preocupación del Ejecutivo se da en un contexto de fuerte aumento de la curva de contagios en la temporada estival, algo que se atribuye a la mayor desatención de la sociedad a las medidas de distanciamiento.
Entre el pasado martes y el viernes volvieron a registrarse más de 13.000 nuevos casos positivos por día, algo que no se daba desde finales de octubre pasado, cuando el ritmo de contagios diarios empezó a descender, hasta que en diciembre volvió a cambiar la tendencia.
Es por eso que entre las medidas que también determinó la provincia bonaerense está el control de las fiestas y eventos sociales, por lo que aquellas que sobrepasen lo que permite la actual normativa serán castigadas con multas impuestas tanto a los asistentes, los organizadores y los propietarios de los inmuebles donde se realicen.
