La investigación de la muerte del fiscal argentino Alberto Nisman centra su atención en los peritajes tecnológicos con el objetivo de esclarecer si hubo accesos a su ordenador portátil y teléfono móvil después de la hora estimada de la muerte, informaron este lunes medios locales.
Según fuentes consultadas por el diario Clarín, los avances preliminares del análisis tecnológico muestran además que hubo diez ingresos remotos al computador de Nisman para borrar información y cambiar el horario y la fecha del aparato, aunque se investiga cuándo se produjeron los accesos y qué contenido se eliminó.
Además, el teléfono del fiscal tenía un virus tipo "troyano", según las fuentes, y del terminal fueron borrados mensajes de texto, conversaciones de "whatsapp" y llamadas.
Mientras que según fuentes cercanas al caso consultadas por el diario La Nación, el computador de Nisman registró una entrada en la noche del día 18 de enero, 12 horas después del momento estimado de la muerte del fiscal y horas antes del descubrimiento del cadáver, con un tiro en la sien, en su domicilio de Buenos Aires.
En ese acceso se introdujeron tres lápices de memoria y hubo alteraciones en los documentos, hecho ya confirmado por la fiscal encargada de la causa, Viviana Fein, en declaraciones radiales, quien sin embargo recalca que hay que esperar para saber si esos registros fueron locales o si se trató de manipulaciones.
Además, según los datos desvelados por La Nación, a primera hora de la mañana del día de su muerte, Nisman se conectó a internet, vio las webs de tres diarios, revisó su correo personal y buscó en Google la palabra "psicodelia."
Informe de pericias tecnológicas no tiene fecha de entrega
Nisman, que investigó durante diez años el atentado contra la mutualista judía AMIA perpetrado en 1994 en Buenos Aires, apareció muerto, de un tiro en la cabeza, el pasado 18 de enero, cuatro días después de denunciar a la presidenta Cristina Fernández, por supuesto encubrimiento de los sospechosos iraníes del ataque terrorista.
Tras la conclusión de la junta médica para analizar los detalles forenses, la fiscal Fein espera el resultado del informe tecnológico para avanzar en el caso, que tras más de cuatro meses no ha logrado definir si se trató de un suicidio, suicidio inducido o asesinato, en medio de fuertes críticas por irregularidades y fallos.
El informe de las pericias tecnológicas aún no tiene fecha de entrega, mientras la investigación oficial vuelve a estar en el ojo del huracán después de que este domingo un programa televisivo mostrara un vídeo oficial de la Policía en el que se aprecia que los peritos manipularon las pruebas de la escena.
En las imágenes, se ve a un perito retirar con un guante parte de la sangre presente en el arma encontrada junto al cadáver de Nisman y después manipular el cargador y las balas con los mismos guantes manchados.
Además, quedó registrado que el perito recibió instrucción de la fiscal Fein de limpiar la sangre con papel higiénico para descubrir el número de identificación del arma.
Transcurridos más de cuatro meses, la investigación por su deceso permanece estancada y hay fuertes divergencias entre la investigación oficial y la encargada por la exmujer de Nisman y querellante en la causa, Sandra Arroyo Salgado.
Arroyo Salgado afirma que su ex marido fue asesinado, pero la fiscal Fein mantiene abierta la puerta a un posible suicidio, al afirmar que no existen pruebas concluyentes para descartarlo.
La Justicia argentina archivó la denuncia de Nisman contra Fernández por "inexistencia del delito"