La ex presidenta de Argentina y actual senadora, Cristina Fernández recibió en su apartamento de Buenos Aires a la ex mandataria de Brasil Dilma Rousseff con quien conversó sobre la "utilización del aparato judicial" como arma para "destruir a la política y a los lideres opositores".
"Este proceso que se denomina mundialmente 'Lawfare' y consiste en la utilización del aparato judicial como arma para destruir a la política y a los lideres opositores", añadió la actual senadora, apenas dos días después de que un juez pidiera a la Cámara Alta que vote despojarla de sus fueros como parlamentaria para que pueda ser detenida por los cargos de los que se le acusa.
En tanto, Fernández calificó de "entrañable" el encuentro en su casa del barrio porteño de Recoleta con la "compañera Dilma", quien llegó a Buenos Aires tras participar en Montevideo del XXXI Congreso de la Asociación Latinoamericana de Sociología (Alas) de Uruguay.
No obstante, la ex presidenta brasileña, que en 2016 fue objeto de un juicio político que concluyó con su destitución, habló en ese foro de la persecución judicial que a su juicio también vive el ex mandatario de su país Luiz Inácio Lula da Silva, a quien según ella, los partidos de centro y derecha quieren destruir por una "guerra política".
En este mismo sentido, para Fernández existe "una matriz" que tiene "otra pata fundamental en los medios de comunicación, una instancia central en esta estrategia de persecución".
"El objetivo es el mismo en Brasil y acá: ocultar el desastre económico que están llevando a cabo los gobiernos neoliberales en la región", concluye en su carta.
Recordar que la causa abierta tras la denuncia que el fiscal Alberto Nisman en enero de 2015 contra Cristina Fernández días antes de aparecer muerto en extrañas circunstancias, se investiga posible acuerdo suscrito entre Argentina e Irán en 2013, el cual, buscaba encubrir, a cambio de impulsar la relación comercial bilateral, a los imputados iraníes del atentado a la Mutual AMIA, que dejó 85 muertos.