Las víctimas mortales por la explosión de gas en un edificio de la ciudad argentina de Rosario son ya 17, tras identificarse el cuerpo de un hombre de 29 años localizado el sábado en la noche entre los restos del derrumbe, informaron fuentes oficiales.
El secretario de Salud de Rosarino, Leonardo Caruana, confirmó el hallazgo del cadáver y precisó que seis personas siguen desaparecidas.
Cinco días después de la explosión, que dejó además más de 60 heridos, de los cuales 11 continúan internados, los rescatistas siguen trabajando sin descanso en el desescombro del inmueble, situado en el centro de la ciudad, la tercera mayor del país, a unos 300 kilómetros de Buenos Aires.
A pesar del paso del tiempo, el objetivo sigue siendo encontrar algún superviviente.
La explosión causó también severos daños en las viviendas de 240 familias, que por ahora no pueden regresar a sus hogares.
La investigación sobre las causas de la deflagración se centra en el técnico del gas que estuvo trabajando en el inmueble minutos antes del siniestro, y que permanece detenido por orden judicial, y en la empresa distribuidora, Litoral Gas, acusada por la fiscalía de haber realizado controles "muy limitados y primitivos".