Caso de monja que ayudaba a curas pedófilos remece a Argentina
Kosaka Kumiko, de 42 años, seleccionaba a menores sordos que eran abusados sexualmente en Mendoza.
Kosaka Kumiko, de 42 años, seleccionaba a menores sordos que eran abusados sexualmente en Mendoza.
Una sórdida historia remece a la sociedad y el clero en Argentina. Se trata de un caso que quedó al descubierto: una religiosa fue detenida, acusada de seleccionar menores de edad más sumisos para que fueran violados por curas.
Se trata de la monja Kosaka Kumiko, de 42 años, quien le dijo al juez que "soy una persona buena que he entregado mi vida a dios". La justicia investiga este caso, donde los menores abusados sexualmente eran sordos que cuidaban en el Instituto Provolo de Mendoza.
Kumiko llegó al colegio en 2007 y por seis años fue "el demonio con cara de mujer", como la llamó uno de los abogados querellantes. Hace unos días se entregó a la Justicia en Buenos Aires, luego de permanecer prófuga por más de un mes.
El fiscal Gustavo Stroppiana la imputó este viernes por ser partícipe de los abusos sexuales ocurridos en la entidad educativa y luego será enviada a la cárcel de mujeres El Borbollón hasta que tenga lugar su juicio. En el
Los medios argentinos destacan la historia de una adolescente, quien contó que cuando tenía cinco años, la monja le colocó un pañal para disimular el sangrado que le producía la violación sistemática que sufría de varios sacerdotes.
Según informa El País, los alumnos aseguran que eran forzados a practicar sexo oral en presencia de los curas y algunos fueron violados y golpeados. Las víctimas son ahora adolescentes que han contado sus testimonios.