La representación diplomática del país quedará a cargo de un encargado de negocios.
El canciller paraguayo se contactó con su par argentino para discutir el tema.
El gobierno de Argentina anunció el retiro de su embajador en Asunción, Rafael Edgardo Romá, tras la destitución de Fernando Lugo como presidente de Paraguay, un acto que el gobierno de Cristina Fernández considera una ruptura del orden constitucional.
La Cancillería argentina informó en un comunicado que el gobierno de Fernández "ha dispuesto el inmediato retiro de su embajador en Asunción, quedando la representación diplomática a cargo de un encargado de negocios, hasta tanto se restablezca el orden democrático" en Paraguay.
Argentina explicó que tomó esta decisión "frente a los graves acontecimientos institucionales ocurridos en la República del Paraguay que culminaron con la destitución del presidente constitucional Fernando Lugo y la ruptura del orden democrático".
Tras la destitución de Lugo, la presidenta argentina dijo este viernes que su país "no va a convalidar el golpe de Estado en Paraguay", y añadió que el juicio político que llevó adelante el Senado paraguayo a Lugo fue "un ataque directo a las instituciones".
Añadió además que Argentina asumirá "una postura mancomunada" con Brasil y Uruguay, socios del Mercosur junto a Paraguay, pero señaló que no va a adelantar su posición sobre la posible expulsión de Asunción del bloque comercial hasta que no haya una posición consensuada.
En tanto el nuevo canciller paraguayo, José Félix Fernández, se puso en contacto con su par argentino durante las últimas horas para discutir el anuncio del gobierno de Argentina, según señaló un vocero de Paraguay.
